Sídney. La racha impresionante de Andy Murray finalizó ayer al caer ante el primer preclasificado, el ruso Aslan Karatsev, por doble 6-3 en la final del torneo de Sídney.
Murray, de 34 años, inició la semana con su primer triunfo en tierra australiana en más de mil días. El ganador de tres torneos fue avanzando hasta llegar a su primera final desde 2019.
“Primera final en tres años, ha sido un camino largo para llegar hasta aquí”, dijo el británico, quien ha caído del número uno en el escalafón a 135. “Haré todo lo posible para regresar y tener más noches como ésta. Tal vez los vea el año que viene”.
Cinco veces finalista del Abierto de Australia, recibió una entrada comodín para el torneo de Sídney y venció a Viktor Durasovic y a Nikoloz Basilashvili, clasificado en el puesto 23, y luego a Reilly Opelka en las semifinales, lo que aumentó las expectativas después de que las lesiones recurrentes en la cadera lo limitaran a jugar sólo uno de los últimos cuatro Abiertos de Australia.
Murray enfrentará a Nikoloz Basilashvili, 23 en el escalafón, a quien derrotó en Sídney, en la primera ronda del Abierto de Austra-lia en Melbourne, que comienza el lunes.
En la final femenil, la española Paula Badosa conquistó el tercer título de su carrera al imponerse a la checa Barbora Krejcikova, campeona vigente de Roland Garros, por 6-3, 4-6 y 7-6 (4).
En el torneo internacional de Adelaida, Madison Keys obtuvo su primer título individual en el circuito femenino desde 2019 al superar a Alison Riske, 6-1 y 6-2 en una final entre estadunidenses.
En Melbourne Park, Keys se enfrentará a su compatriota Sofia Kenin –quien salió campeona en 2020– en la primera ronda. La contrincante de Riske será la croata Donna Vekic.