Melbourne. Consideraciones legales, políticas y diplomáticas determinarán si Novak Djokovic puede buscar su título 21 del Grand Slam en el Abierto de Australia.
El serbio fue incluido provisionalmente entre los inscritos, pero la saga en torno a su visa y su negativa a vacunarse no ha terminado. Su futuro inmediato está en manos del ministro de Migración de Australia Alex Hawke, quien decidirá si anula la orden de un juez que permitió al tenista permanecer en el país y lo deporta, incluso a mitad de torneo.
Medios australianos indican que la decisión debería ser inminente, aunque el primer ministro Scott Morrison afirmó que la posición de Hawke “no ha cambiado” y si-gue analizando el tema.
Mientras, el primer Grand Slam del año trata de seguir con el calendario. Así, aunque con más de una hora de retraso que los organizadores no justificaron, se celebró el sorteo del cuadro con la inclusión de Djokovic, que enfrentaría en primera ronda a su compatriota Miomir Kecmanovic.
El español Rafael Nadal, sexto cabeza de serie y quien también busca su título 21, se medirá con el estadunidense Marcos Giron.
Los dos astros, empatados a 20 Grand Slams junto al suizo Roger Federer, competirán en Melbourne para hacerse con el número 21 en su carrera, récord histórico en el tenis masculino. Sus caminos no se cruzarán hasta una eventual semifinal.
De acuerdo con el reglamento del torneo, si Djokovic se viera obligado a retirarse antes de que se publique el orden de juego, el domingo por la noche, su puesto sería relevado por el quinto sembrado, en este caso, el ruso Andrey Rublev. Y se recorrerían los siguientes en el cuadro.
En caso de que el serbio fuera deportado después de conocerse el rol principal, sería relevado por el jugador que haya perdido la última ronda de calificación, y si debiera abandonar cuando ya haya disputado algún partido, su siguiente rival avanzaría sin jugar.
En el cuadro femenino, la número uno mundial Ashleigh Barty también se enfrentará con una jugadora de las clasificatorias y Garbiñe Muguruza, flamante ganadora del Masters WTA, se medirá a la joven Clara Burel.
La campeona vigente, la japonesa Naomi Osaka, quedó en la misma parte de cuadro con Barty, lo que supone que las dos mejores jugadoras del torneo podrían enfrentarse en la cuarta ronda con sabor a final.
Hasta ahora, la vertiente deportiva del torneo se ve eclipsada por el conflicto Djokovic, ganador de nueve títulos en Melbourne, incluidas las tres últimas ediciones.