A gritos y de rodillas, los hijos de Alejandra Cuevas Morán, acusada por el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, de homicidio, interpelaron al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar, para exigir la libertad de su madre.
Zaldívar acudió a la apertura de cursos del área de derecho de la Universidad Iberoamericana, y al final de la ceremonia aceptó preguntas de los estudiantes, pero el primero que hizo uso de la palabra fue Alonso Castillo Cuevas, hijo de Cuevas Morán, quien reclamó que haya atraído el caso, con lo cual retrasó la liberación de su madre.
Alejandra Cuevas es hija de Laura Morán Servín, quien fue pareja sentimental de Federico Gertz Manero, hermano del titular de la FGR, quien acusa a ambas mujeres de homicidio por omisión, al supuestamente descuidar su atención médica.
Alonso Castillo reprochó al ministro presidente el que el máximo tribunal haya guardado silencio desde que atrajeron el caso y acusó a los ministros de ceder a las presiones de Gertz: “Han pasado más de 60 días y lo único que hemos recibido de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es un silencio absoluto que nos mata, al igual que la celda asfixia a mi madre”.
Ana Paola Castillo Cuevas, otra de las hijas de Cuevas Morán, se acercó hasta la mesa del presídium, se arrodilló ante Zaldívar y suplicó la libertad de su madre: “¡Tú tomaste el caso de mi mamá y lo jalaste a la Suprema Corte, me dejaste otra Navidad sin ella”!
Zaldívar les pidió confiar en la SCJN y afirmó que él no atrajo el caso, sino que la decisión fue tomada por el pleno de ministros, con mayoría de ocho votos.
“Trataremos de hacer lo correcto; con base en lo que dice en el expediente, la Corte decidirá”, respondió Zaldívar, quien dijo que no podía manifestarse sobre un caso que está pendiente de sentencia.