El presidente local de Morena, Tomás Pliego Calvo, afirmó que su partido no ha quitado el dedo del renglón en el tema de las prerrogativas a partidos, por lo que analiza presentar una denuncia penal contra el ex consejero presidente del Instituto Electoral de la Ciudad de México Mario Velázquez Miranda.
En conferencia de prensa, dijo que el hecho de que se haya pagado el financiamiento público a los institutos no significa “que nosotros vamos a desistir de los procedimientos que iniciamos”, en referencia a la denuncia interpuesta ante la contraloría interna por presunta desviación de recursos públicos.
Comentó que el miércoles se darán a conocer los detalles de las denuncias interpuestas tanto en la contraloría como en la Auditoría Superior de la Ciudad de México.
En tanto, integrantes de ese partido anunciaron que sus funcionarios públicos, diputados federales y locales, alcaldes y concejales realizarán asambleas de rendición de cuentas a 100 días de haber tomado el cargo.
Al respecto, Pliego comentó que se trata de una obligación moral informar permanentemente a la ciudadanía lo que se está realizando, en qué se está trabajando y de qué manera repercute en la calidad de vida de la gente, así como hacer frente a noticias falsas difundidas por la oposición.
Detalló que las asambleas no serán masivas dada la pandemia de covid; no obstante, sí se realizarán de manera presencial con medidas sanitarias y en espacios abiertos como parques y camellones; algunas se harán de manera virtual.
Por otra parte, en el mensaje, la coordinadora de la bancada de Morena en el Congreso capitalino, Martha Ávila, aprovechó para reportar la instalación total de los 66 módulos ciudadanos de cada diputado, donde se prevé realicen los informes de los 100 días.
Impugnan registro
En otro tema, el partido Fuerza por México impugnó ante el Tribunal Electoral de la Ciudad de México la pérdida de su registro local, con el argumento de que la pandemia no les permitió realizar campañas electorales como se efectuaban de manera tradicional: con asistencia presencial y sin guardar sana distancia.
Para el partido, señaló, la autoridad electoral local no valoró el obstáculo que implicaba acercarse a la gente a través de los medios digitales, a los cuales “no estaba, ni está, preparada la población.
“El partido no pudo realizar campaña a pie, casa por casa, buscando el apoyo popular; tampoco pudo realizar libremente la campaña de boca en boca, pues la limitación generada por la emergencia sanitaria afectó los lazos con la población”.