Washington. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, mantuvo ayer una conversación telefónica con su par de Rusia, Sergéi Shoigu, sobre las próximas negociaciones en Ginebra para abordar el tema de la concentración militar rusa en la frontera con Ucrania.
Ambos discutieron respecto de “la reducción del riesgo cerca de las fronteras de Ucrania”, en medio de las continuas preocupaciones en Estados Unidos y Europa occidental por la posibilidad de que Rusia invada, informó John Kirby, vocero del Departamento de Defensa.
El gobierno ruso ha acumulado unos 100 mil soldados en la frontera y el Kremlin dejó claro que quiere garantías de que no se invitará a Ucrania a unirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la no expansión militar e ideológica occidental en esa región de Europa.
El secretario de Estado, Antony Blinken, sostuvo el miércoles que las conversaciones con Rusia no tendrán éxito mientras haya un “arma apuntando en la cabeza de Ucrania”. Para que haya “un progreso real” se requerirá una desescalada”, señaló el diplomático.
La subsecretaria de Estado, Wendy Sherman, y el subsecretario general de OTAN, Mircea Geoana, reafirmaron que están preparados para un diálogo significativo con Rusia, aseguró el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en conferencia de prensa.
Desde Londres, la canciller británica, Elizabeth Truss, apremió a la Alianza del Atlántico a mantener un frente común sobre Moscú en las siguientes rondas de conversaciones.