Chihuahua y Nuevo León registraron ayer las cifras más altas de contagios de covid-19 en toda la pandemia, informaron autoridades de salud estatales.
En la primera entidad se documentaron 896 casos en 24 horas; superando los 778 del miércoles y los 827 del 12 noviembre de 2020, cuando la entidad llegó al mayor punto de la curva epidémica y era la primera del país en padecer la segunda ola del coronavirus.
La Secretaría de Salud reportó que 472 de los nuevos casos se detectaron en la ciudad de Chihuahua y existe riesgo de que haya un incremento tanto de hospitalizaciones como de fallecimientos, lo que se determinará la próxima semana; la ocupación de camas en los nosocomios es de 58.06 por ciento, con 198 pacientes.
En Nuevo León se consignaron en el más reciente registro 2 mil 574 enfermos de coronavirus en un día, el pico más alto durante la contingencia; el anterior fue en agosto de 2021, en medio de la tercera ola, cuando hubo 2 mil 83 contagios.
No obstante, el gobierno de esa entidad anunció el regreso a clases de manera mixta (presencial y virtual) el próximo lunes, aunque con un aforo en aulas de 50 por ciento. También propuso el escalonamiento de horarios laborales por sectores económicos.
El proyecto es que las actividades industriales se inicien a las siete de la mañana, las de servicios a las ocho y las comerciales a las 10.
“Este es un llamado con la finalidad de evitar cierres”, dijo el Secretario de Economía de Nuevo León, Iván Rivas Rodríguez, quien aclaró que se pretende que esta medida no sea temporal y que los beneficios de movilidad y reducción de contaminación sean permanentes.
En Acapulco, Guerrero aumentó más del doble el número de infectados de SARS-CoV-2 del primero de enero a este jueves, de 74 a 192.
Sin embargo, de las 477 camas con ventilador de respiración artificial disponibles en la entidad, sólo 33 se encuentran ocupadas, lo que equivale a 7 por ciento.
En Baja California, 65 por ciento de las pruebas de detección del coronavirus realizadas en la última semana han resultado positivas, por lo cual las autoridades estatales decretaron solicitar certificado de vacunación o pruebas negativas de no más de cinco días a la gente que visite cines, restaurantes, bares y centros comerciales, entre otros sitios públicos.
El titular de Salud, José Adrián Medina, indicó que no se tiene la intención de “infundir terror en la población”, pero la alza va a continuar y ciudadanos, comercio e industria tienen que ser corresponsables.
En Jalisco, los casos confirmados en los primeros días del año han tenido incrementos de casi cien por ciento de un día a otro, por lo que el gobierno estatal y los municipales analizan la posibilidad de pedir constancia de inmunización o pruebas negativas recientes para permitir el ingreso a actos masivos.
La Secretaría de Salud local puntualizó que el lunes se determinará si se mantienen las clases en línea en primaria, cuyo regreso a las aulas está previsto para el 17 de enero.
Refuerzan restricciones
El gobernador Enrique Alfaro recalcó que aunque la letalidad por coronavirus está muy por debajo de la del año pasado, las acciones preventivas deben reforzarse.
Mientras tanto, Aguascalientes, Nayarit y Chiapas confirmaron la llegada de la variante ómicron. En la última entidad resultó positivo un hombre de 31 años con residencia en Tuxtla Gutiérrez, quien viajó al extranjero y se encuentra asintomático; en la primera, se trata de una mujer de 26 años, cuyo estado de salud es estable y en la segunda se contagió un individuo de 47 años, oriundo de Tepic.
El gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro, ordenó ayer la suspensión de clases presenciales durante las próximas dos semanas para salvaguardar la salud de docentes, alumnos y trabajadores administrativos en las escuelas; además ordenó un aforo máximo de 50 por ciento en establecimientos comerciales, actos masivos, centros de espectáculos y otros lugares de entretenimiento.
Asimismo, el Consejo Estatal de Seguridad y Salud de Tamaulipas emitió un decreto que determina que a partir del lunes los alumnos de educación básica recibirán instrucción a distancia en 43 municipios, después de que el miércoles pasado 11 de dichas localidades pasaron a color rojo en los indicadores estatales de la pandemia.
El secretario de Salud de Oaxaca, Juan Carlos Márquez, señaló que hasta ayer se encontraron en el estado dos casos de la variante ómicron, pero 50 muestras más han sido enviadas a laboratorio.
El gobernador Alejandro Murat descartó aplicar medidas extraordinarias, pero recordó que es importante que la sociedad siga los protocolos recomendados desde hace casi dos años.
Mientras, Quintana Roo retrocederá de verde a amarillo en el semáforo epidemiológico del 10 al 16 de enero, publicó ayer el gobernador Carlos Joaquín González en sus redes sociales. En el mensaje detalló: “No habrá cierre de actividades económicas, pero sí restricción en aforos y horarios”.
Desde la mañana del jueves, los centros comerciales anticiparon que debido el aumento de contagios de covid-19, a partir de este viernes nuevamente se limitará el acceso a los establecimientos a dos personas por familia, y estará prohibirá la entrada a mujeres embarazadas, niños y personas de la tercera edad.
En Michoacán se registraron en el último corte 227 nuevos casos confirmados de SARS-CoV-2, 141 por ciento más que el 31 de diciembre; del total,102 corresponden a Morelia.
En Baja California Sur, el mandatario estatal, Víctor Manuel Castro, y su esposa, Patricia López, dieron positivo al padecimiento.
En su cuenta de Twitter, el gobernante manifestó que ambos se encuentran bien y permanecerán en casa. “Desde aquí estaré atento de los asuntos de gobierno”, aseguró.
En este contexto, trabajadores del área de pruebas covid del hospital Santiago Ramón y Cajal del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado en la ciudad de Durango, iniciaron un paro de brazos caídos para exigir un contrato laboral que los respalde.
La dirección del nosocomio explicó que el asunto fue turnado a las oficinas centrales, que darán respuesta definitiva. Las personas que solicitaban servicios tuvieron que acudir a laboratorios privados o a la Cruz Roja, donde debieron pagar hasta 400 pesos.
En esta urbe la positividad de los exámenes de detección del virus pasó de 35 a 60 por ciento en los últimos seis días.