Aclaración del titular de Educal
En últimas fechas se han publicado en El Correo Ilustrado una serie de misivas (8 de diciembre de 2021 y 4 de enero de 2022), en las cuales se han sembrado una serie de imprecisiones con respecto a la relación comercial que han mantenido la red nacional de librerías Educal con el proveedor Jermán Argueta, director general de Crónicas y Leyendas Mexicanas.
Es justo aclarar las ambigüedades, para que posteriormente no existan dobles entendimientos de la realidad:
1) Durante 2020 no se recibieron contrarrecibos de parte del editor; es por ello que no se generaron otros pagos aparte de los ejecutados durante los días 4, 11 y 25 de febrero de 2020.
2) A partir del 22 de septiembre recibí un correo electrónico de parte del editor, solicitando los pagos que se hubieran generado durante el resto de 2020 y 2021, por lo cual el 29 del mismo mes se le hizo la invitación para que entregara la documentación correspondiente para generar la liquidación; luego de otro tipo de intercambios a través de los correos electrónicos y de una conversación telefónica que sostuvimos el 24 de noviembre del año pasado, se acordó que antes de que concluyera el periodo se realizaría el pago correspondiente, el cual se llevó a cabo el 30 de diciembre del año pasado, motivo por el cual me extraña la existencia de la carta dirigida el día de ayer al Presidente de la República; tal vez el editor no ha tenido la dedicación de revisar su cuenta bancaria para constatar que se cumplió con la palabra pactada durante el diálogo mencionado.
Fritz Glockner, director de Educal
Agradecido por recibir refuerzo de vacuna anticovid
Después de ser reforzados con nueva vacunación le decimos a ómicron que nos hace los mandados.
Benjamín Cortés V.
Convocatoria social plena, sin regateos
Somos generaciones enteras, las que no niegan la guerra de tantas batallas perdidas, las que con su sangre le dan cuerda al mundo, somos el escaso eco activo para nuestra mayoría de clase, el escandaloso silencio del poder de Estado, hemos aprendido a tragarnos nuestra propia hambre, somos la quimera del mito ideológico de izquierda, pero somos la necedad, sobrevivientes a nosotros mismos, que nos convoca una y otra vez para estrecharnos unidos y marcar, siempre a contrarreloj, la historia en justo momento. ¿Cómo nos convocamos?
Desde el inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, le demandamos un pacto social de Estado con la sociedad en pleno, para revertir el gran daño estructural del régimen del Prian. Para la sociedad es extender el puente, por todos los medios, del lenguaje natural, llano, narrativa humilde y noble y hacernos una sola voz. Lo anterior no es posible si el movimiento social activo no rompe el paradigma para lograr la tan anhelada unidad política, porque la ideológica es valor entendido en conciencia de clase. La anterior ya está escrita; la presente: o la firmamos aquí y ahora, pues no podemos dejar en blanco la hoja de la historia a la futura generación. Esta es la fundamental convocatoria, sin más regateos.
Ismael Cano M.
En memoria del maestro Luis Arévalo Venegas
El maestro Luis Arévalo Venegas (Tepito, 1940-Tepito, 24 de diciembre de 2021) cerró su ciclo a los 81 años. Fue zapatero, oficio que aprendió de su padre desde los 7 años. Dónde y cómo adquirió una dimensión social de su quehacer, no lo sabemos. Tuvimos la fortuna de contar con su apoyo como piedra angular en los talleres de zapatería que se implementaron en algunas regiones autónomas zapatistas. Fue un trabajo conjunto de la sociedad civil y las bases de apoyo del EZLN. Se requirieron máquinas de coser, moldes de hormas para calzado y otros enseres para la fabricación de botas y zapatos. Muchas personas apoyaron, ya sea con recursos, con ingenio, con su tiempo, buscando y encontrando lo necesario. Los insumos como piel, ojales, pegamento, suelas, etcétera, requirieron el concurso de muchos otros compañeros. Permítanos agradecer a toda la sociedad civil que hizo posible este proyecto. Y claro, el trabajo de los compañeros de las comunidades indígenas así como el conocimiento y la disposición de Luis Arévalo el maestro, Luis asesor, Luis coordinador, Luis el que sabe.
Gracias, maestro Luis Arévalo; su sabiduría llegó a distintos confines donde muchos jóvenes aprendieron de usted. Su compromiso caló hondo en muchos de nosotros que le conocimos. Además, como regalo inesperado, nos mostró una faceta humana y esperanzadora del barrio de Tepito.