Ciudad de México. Estamos en tiempos de cambios y no hay que ocultar nada, no debe haber tapadismo, respondió el presidente Andrés Manuel López Obrador, ante los cuestionamientos al procedimiento de sucesión presidencial entre los aspirantes de Morena, y defendió su propuesta de aplicar encuestas para resolver las candidaturas.
“Se equivocan quienes piensan: ‘A ver, yo soy muy conocido y tengo muchas simpatías y me quieren, y aunque yo haga lo que haga puedo yo encapricharme y la gente me va a seguir, porque yo soy muy importante’. ¡No! Se equivocan.”
Tranquilo, sujetando los extremos del atril que utiliza en sus conferencias de prensa, negó la posibilidad de rupturas en su partido. “No pasa nada absolutamente. Es que el pueblo es mucha pieza, es más que nosotros, los dirigentes”, repuso.
En su amplia respuesta, remitió al general Porfirio Díaz, y de cómo desde entonces –aseguró–, el tapadismo se vincula a la cargada y al besamanos, prácticas ominosas contra las que no pudo la Revolución Mexicana.
“Se debe acabar la simulación, porque la Constitución establece que todos tenemos derecho a votar y ser votados. Entonces, el que quiera participar, que lo haga. Y si está en el gobierno o tiene una función, tiene derecho, nada más que no abandone su trabajo o que no use su puesto para sacar provecho. ¿Quién lo va a decidir en su momento? Pues el pueblo. ¿Cómo? Mi opinión, que lo mejor son las encuestas, esa es mi opinión, porque lo otro se presta hasta para que interfieran los adversarios, porque quisieran ellos tener candidatos a modo”, se preguntó y se respondió.
Así, en su idea de trasparentar, pidió que “se ventile todo, que se expresen todos, que haya libertades”.
–¿Cree que estas disputas puedan causar rupturas dentro de Morena? –se le insistió.
–No pasa nada absolutamente. Es que el pueblo es mucha pieza, es más que nosotros, los dirigentes. Se equivocan quienes piensan: ‘A ver, yo soy muy conocido y tengo muchas simpatías y me quieren, y aunque yo haga lo que haga puedo yo encapricharme y la gente me va a seguir, porque yo soy muy importante’. ¡No!, se equivocan.
“Voy a poner un ejemplo. Yo, por convicción, porque sería traicionarme, he dicho no a la relección, sí, por convicción, nunca lo haría, eso está muy claro. Y nada de que ‘yo puedo terminar la obra, consumar la obra de transformación, no se puede quedar a medias, falta un poquito de tiempo’. Nada de eso, nada de caer en el necesariato, nada, nada.”
En su sugerencia de que participen quienes deseen, matizó, pues “deben de estar pensando en que primero es el pueblo, después el pueblo y siempre el pueblo. Nada de que son los títulos, las buenas relaciones, los desayunos con políticos, la lambisconería, el influyentismo, no. Es la gente, el pueblo. Algunos se sorprenden cuando se hacen las encuestas: ‘Cómo no voy a salir, si yo tengo capacidad académica, si tengo conocimiento de la administración pública, si yo esto, si yo lo otro’”.
Por otro lado, descartó que el apoyo de su gobierno a las administraciones estatales y universidades públicas sea considerado como adelanto de sus presupuestos en este 2022. “No, no, esto es parte de lo mismo, tienen bastante imaginación nuestros adversarios, pero no se apegan a la realidad. Cuando tienen problemas que no les pagan a los maestros, nos piden, ayuda, nosotros apoyamos, que es lo que hicimos este fin de año.”