La actividad manufacturera mexicana registró una desaceleración en el último mes de 2021. El Indicador de Pedidos Manufactureros (IPM) se situó en 52.4 puntos en diciembre, lo que representó un descenso de 0.4 puntos, con respecto al mes anterior.
Este índice, publicado mensualmente por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se ubicó por encima del umbral de los 50 puntos que supone crecimiento en la industria, hilando 17 meses consecutivos por arriba de este umbral.
De acuerdo con las estadísticas, el ritmo de la producción se contrajo respecto al mes anterior, cuando en noviembre aumentó 0.3 puntos, ya que en diciembre cayeron tres de sus cinco componentes, relativos a los pedidos esperados de producción, la oportunidad en la entrega de insumos por parte de los proveedores e inventarios de insumos; mientras el volumen esperado de pedido y personal ocupado aumentó.
El volumen esperado de pedidos manufactureros avanzó 0.1 puntos, ubicándose en 54 unidades; la producción esperada cayó 1.2 puntos; el personal ocupado total, que se ubicó en 51.1 puntos, aumentó 0.1 unidades; la entrega esperada de insumos retrocedió 1.9 puntos, e inventarios de insumos cayó 2.7 puntos.
Los cuellos de botella en la cadena de suministros a nivel mundial, que han sido persistentes durante el año, deterioraron sus perspectivas con la presencia de la nueva variante ómicron de coronavirus, toda vez que todavía no se restablecían del todo.
En su comparación anual, los pedidos manufactureros registraron una desaceleración y avanzaron 1.4 puntos en diciembre, luego de que en octubre lo hicieran 2.2 puntos. Los pedidos esperados en octubre registraron un crecimiento de 1.7 puntos.
Marcos Arias, analista económico de Monex, precisó que pese a que el Indicador de Pedidos Manufactureros acumuló 17 meses consecutivos dentro de la zona de expansión, el ritmo de crecimiento de las operaciones en el último mes del año pasado se relajó respecto a noviembre.
“Lo anterior se debe en buena medida a una caída en el rubro de entrega de insumos, que había mejorado notablemente entre agosto y noviembre, pero que habría resentido el surgimiento de cuellos de botella tras la intensificación de los contagios. Además, el indicador clave del volumen de producción retrocedió de 54.7 a 53.5, por lo que es posible que el sector manufacturero registre una desaceleración en el último mes del año”, detalló Arias.
Con cifras originales, el IPM en diciembre tuvo el mayor nivel en el subsector de textiles, prendas de vestir, cuero y piel, madera, papel y otras, con 50.9 unidades, un incremento de 3.8 puntos. Le sigue equipo de transporte, con un avance de 2.6 puntos.
El IPM se construye con los resultados de la Encuesta Mensual de Opinión Empresarial, mismos que permiten conocer casi inmediatamente después de terminado el mes de referencia las expectativas y la percepción de los directivos empresariales sobre el comportamiento del sector manufacturero en México.