Chilpancingo, Gro., El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, dio a conocer que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda se ha negado a recibir en audiencia a los cuatro purpurados de Guerrero. “Hay muchos problemas pendientes, principalmente en materia de seguridad, que se tienen que analizar ampliamente”, advirtió.
En entrevista, reprochó: “no hemos tenido oportunidad. Nos dicen que es problema de agenda, pero pienso que es falta de voluntad. Si no quieren hablar, es asunto de ellos. Antes de la campaña, la maestra (Evelyn Salgado) vino a hablar conmigo y me prometió que iba a restituir la Subsecretaría de Asuntos Religiosos. Hasta ahora no ha cumplido”.
Expuso que él y los otros tres jerarcas de la Iglesia católica en el estado (Joel Ocampo, de Altamirano; Dagoberto Sosa, de Tlapa, y Leopoldo González, de Acapulco) “tenemos interés en hablar con ella, pero no se prestan. No sé qué zancudo les picó. Si no hay interés, seguimos cada araña por su hebra. Hace un mes pedimos la audiencia, y no ha habido nada”.
Rangel Mendoza subrayó que para 2022 prevé un panorama complicado: “Sigue habiendo asesinatos en Acapulco, Chilpancingo, Huitzuco, Iguala y Tetipac. No veo las cosas definidas. A pesar de que el gobierno estatal tiene su propio método, yo no lo veo”.
Lamentó que las autoridades “cierren los ojos y no quieran ver”. Afirmó que en el gobierno pasado (a cargo del priísta Héctor Astudillo), familias del municipio de Chichihualco fueron desplazadas por un grupo criminal que ha cometido asesinatos, cobro de piso y secuestros. “¿Por qué la autoridad no pone atención y los mete en cintura?”
Se habló, agregó, de la designación “de un secretario (general de Gobierno, Saúl López Sollano) con muchos títulos, pero hay una cierta complacencia con estas bandas (delincuenciales) y no se ha podido hacer nada. Creo que se puede llegar a algunos arreglos decentes.
Propone pactar con cárteles y desconfía de la nueva fiscal
Rangel reiteró su propuesta de pactar con las organizaciones delictivas en el estado, “por ejemplo, repartirse bien los territorios; en el caso de Acapulco, porque el problema de las drogas nunca va a terminar, ya que son lugares de recreación, de placer, y siempre habrá alcohol, prostitución y drogadicción, porque a eso viene (la gente), al reventón, y por lo tanto hay que regularlas. En Chilpancingo también se puede llegar a un arreglo”.
Criticó la designación de la teniente coronel Sandra Luz Valdovinos Salmerón como fiscal de Guerrero. “Es una militar a modo del partido Morena, y creo que fue una indicación del presidente (Andrés Manuel López Obrador), de la gobernadora (Evelyn Salgado) y del senador Félix (Salgado). El pendiente que tengo es que, como militar, tiene obediencia a sus jefes inmediatos, no es una fiscal independiente, con autonomía. Va a depender de otras personas”.
Recordó que López Obrador prometió que “iba a sacar a los soldados de las calles, pero más bien implementó con la Guardia Nacional la militarización del país y ahora la de la procuración de justicia”.