Ciudad del Cabo. El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, elogió al fallecido arzobispo Desmond Tutu como “nuestra brújula moral y conciencia nacional”, en el mensaje que enunció en el funeral de Estado del líder de la lucha contra el apartheid.
“Nuestro difunto padre fue un cruzado en la lucha por la libertad, la justicia, la igualdad y la paz, no sólo en Sudáfrica, el país donde nació, sino en todo el mundo”, expresó Ramaphosa en el servicio religioso celebrado en la Catedral de San Jorge, en Ciudad del Cabo, donde Tutu predicó durante años contra la injusticia racial.
Tutu, premio Nobel de la Paz en 1984 por su oposición no violenta al dominio de la minoría blanca, murió el domingo pasado a los 90 años.
En el exterior de la catedral, donde se restringió el número de fieles por las medidas contra el Covid-19, había carteles que mostraban a Tutu con las manos entrelazadas.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, quien dirige la Comunión Anglicana mundial, señaló en un mensaje grabado: “La gente ha dicho ‘cuando estábamos en la oscuridad, él trajo la luz’ y eso (...) ha iluminado a países del mundo que luchan contra el miedo, los conflictos, la persecución y la opresión”.
El cuerpo del Nobel será reducido a polvo por aquamación, un nuevo método de cremación basado en la combinación de agua y altas temperaturas, presentado como una alternativa ecológica a los modos de sepultura clásicos.
Como la técnica de compostaje de los cuerpos con capas de hojas y madera, o el nitrógeno líquido, la aquamación es un método fu nerario permitido sólo en algunos países.
De su nombre científico “hidrólisis alcalina”, consiste en la cremación por el agua más que por el fuego. Los restos del fallecido se depositan en un gran cilindro metálico y luego se sumergen en agua y productos alcalinos.
La sustancia se calienta a alrededor de 150 grados centígrados, y se pone bajo presión, proceso que permite una rápida disolución de los tejidos en el interior de la caja, que se disuelven y dejan sólo los huesos que son luego reducidos a polvo blanco y colocados en una urna.