Funcionarios de las oficinas centrales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de la delegación 4 sur en la Ciudad de México acudieron ayer al Hospital General de Zona (HGZ) número 30, donde trabajadores denunciaron la existencia de un brote de Covid-19 que afecta a pacientes internados y personal médico y de enfermería.
Sólo algunos de los empleados pudieron conversar con los funcionarios. Una enfermera se acercó para informarles que una mujer, con diagnóstico de SARS-CoV-2 desde el miércoles, ayer continuaba en una sala que compartía con otra paciente sin Covid-19. Sólo las separaba una cortina. Los visitantes recorrieron los diferentes pisos del nosocomio y se retiraron sin proporcionar alguna información al personal de la unidad médica.
La denuncia de los trabajadores sobre los casos de Covid-19, publicada en este diario (La Jornada, 30/12/2021), también se refirió a la negativa de las autoridades del HGZ 30 de realizarles la prueba de laboratorio PCR para descartar la presencia del coronavirus, pues sólo se aplica a quienes presentan síntomas, entre los que estuvieron dos enfermeras.
Ayer, en el turno matutino, a una de ellas le entregaron su resultado positivo a Covid-19. La toma de muestra se efectuó el lunes, y aunque ha tenido síntomas, siguió presentándose a su unidad, porque “hasta que salimos positivos nos dan incapacidad; mientras, tienes que venir a trabajar”, comentaron sus compañeros.
Ya con el resultado del examen, la enfermera se retiró con la indicación de sus jefes de acudir a su unidad de medicina familiar, mientras sus colegas se hicieron cargo de los pacientes que tenía asignados.
Una enfermera más, a quien también le fue aplicado el estudio clínico, ayer seguía en espera del resultado.
Los empleados insistieron en la importancia de que se extienda la cobertura de las pruebas de laboratorio, con la finalidad de “romper las cadenas de contagio”, porque “aunque no haya síntomas, podemos tener la enfermedad y transmitirla a familiares, pacientes y compañeros de trabajo”.
Los visitantes de las oficinas centrales del IMSS y de la delegación sur llegaron alrededor de las 10 de la mañana. Entraron por el área de urgencias y se dirigieron a la oficina de la dirección del hospital.
Después recorrieron las diferentes áreas del inmueble. “Sólo pasaron, no se presentaron ni nos dijeron nada. Tampoco nos dejan acercarnos. Las autoridades del hospital no lo permiten”, comentaron trabajadores.
Hasta ayer por la tarde no se registró ningún cambio en los servicios del nosocomio, salvo que al terminar su jornada laboral, el personal de enfermería recibió la indicación de presentarse en el laboratorio para que les realizaran la prueba de detección del SARS-CoV-2. Algunos acudieron, pero “era mentira”. Les dijeron que regresen este viernes a las 9:30 horas.