Las desigualdades sociales, la crisis climática y los desafíos globales imponen un cambio de rumbo en la educación, sostiene la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), que lanzó un llamado a los gobiernos del mundo para impulsar un nuevo pacto social para la educación en el que propone, entre otros ejes, impulsar una pedagogía orientada a la cooperación, la colaboración y la solidaridad.
En el Informe Mundial sobre los Futuros de la Educación, agrega que los planes de estudio deben dejar de estructurarse como una cuadrícula de temas e incluir contenidos ecológicos, interculturales e interdisciplinarios de aprendizaje.
El organismo alerta que ante el acelerado deterioro ambiental del planeta, la pobreza, el retroceso democrático y la irrupción de las tecnologías de automatización, la educación de calidad “no puede ser un privilegio de las élites”.
Por ello, considera que la renovación de la educación pasa por una pedagogía que formente las capacidades inteleectuales de los alumnos, pero también las sociales y morales, a fin de que puedan “trabajar juntos y transformar el mundo con empatía y compasión”. Asegura que se deben “desaprender” los prejuicios y las divisiones.
La enseñanza, asegura, debería seguir profesionalizándose como una labor colaborativa en la que se reconozca la función de los docentes productores de conocimientos y figuras clave de la transformación educativa y social.
La tarea de los maestros debería caracterizarse por la colaboración y el trabajo en equipo. La reflexión, la investigación y la creación de conocimientos y nuevas prácticas pedagógicas deberían ser parte integrante de la enseñanza. Esto significa que hay que respaldar la autonomía y la libertad de los docentes, que deben participar plenamente en el debate público y el diálogo sobre los futuros de la educación.
En cuanto a la escuela, la Unesco propone protegerla como espacio educativos de inclusión y equidad, pero también debe reunir a personas de grupos diversos y hacer de los centros escolares lugares más multiculturales y flexibles.