Moscú. El presidente ruso, Vladimir Putin, exhortó ayer a Occidente a atender “de inmediato” la demanda rusa de garantías de seguridad que impidan a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) incorporar a Ucrania, y aseguró que Estados Unidos es el que viene “hasta nuestra casa”.
En su conferencia de prensa anual, Putin describió como un paso “positivo” las conversaciones con Estados Unidos que comenzarán en Ginebra el mes próximo, pero advirtió que Moscú espera resultados inmediatos.
La semana pasada, Rusia presentó propuestas para que la OTAN niegue la membresía a Ucrania y dé marcha atrás a los despliegues militares de la alianza en el centro y este de Europa.
Un principio clave de la alianza de la OTAN es que cualquier país que cumpla los requisitos puede ser miembro.
Putin acusó a Occidente de engañar a Rusia al hacer promesas en la década de los 90 sobre no expandir la presencia de la OTAN hacia el este para luego incorporar a la alianza a países del ex bloque soviético en el centro y este de Europa y las ex repúblicas soviéticas bálticas.
Polonia, Hungría y República Checa se sumaron a la OTAN en 1999, seguidos por Bulgaria, Rumania, Eslovaquia, Eslovenia y las ex repúblicas soviéticas de Estonia, Letonia y Lituania, en 2004. En años posteriores, Albania, Croacia, Montenegro y Macedonia del Norte también se unieron, lo que aumentó la membresía de la OTAN a 30 naciones.
“¿Somos nosotros quienes estamos colocando misiles cerca de las fronteras de Estados Unidos?”, preguntó Putin. “No, es Estados Unidos el que viene hasta nuestra casa con sus misiles. Ellos de antemano se encuentran en el umbral de nuestro hogar. ¿Es excesivo exigir que no sean colocados sistemas ofensivos cerca de nuestro hogar?”
Moscú hizo sus exigencias en medio de tensiones crecientes por un aumento de tropas rusas cerca de Ucrania que han avivado el temor de una posible invasión. El presidente estadunidense, Joe Biden, advirtió a Putin en videoconferencia este mes que Rusia enfrentará “consecuencias graves” en caso de que ataque a Ucrania. Medios estadunidenses, citando los servicios de inteligencia, afirman que Rusia podría invadir Ucrania a comienzos de 2022. Putin ha negado tener intenciones de invasión.
Cuando se le preguntó ayer al mandatario si podía garantizar que Rusia no atacará a Ucrania, respondió: “¿Cómo responderían los estadunidenses si nosotros pusiéramos nuestros misiles en las fronteras de Estados Unidos con Canadá o México?”
Rusia se anexionó la península ucrania de Crimea en 2014 y poco después expresó su apoyo a una rebelión separatista en el este del país.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, conversó con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, sobre las preocupaciones en cuanto a la actividad militar de Rusia cerca de Ucrania, pero transmitió la disposición de Washington para entablar un diálogo para resolver el problema, informó el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
El vocero agregó que “Stoltenberg afirmó que la Alianza permanece lista para un diálogo significativo con Rusia, mientras se mantiene unida para defender y proteger a los países miembros”.
Londres condena la retórica incendiaria del Kremlin
La ministra británica del Exterior, Liz Truss, condenó la “retórica agresiva e incendiaria” del Kremlin respecto de Ucrania y la OTAN, pero se mostró satisfecha por la voluntad de Moscú de participar en discusiones. “Cualquier incursión rusa sería un grave error estratégico y se combatirá con la fuerza”, en particular mediante “sanciones coordinadas con nuestros aliados, con el objetivo de imponerles un alto precio a los intereses y a la economía de Rusia”, prosiguió.
Al subrayar el “carácter defensivo de la OTAN”, la ministra destacó que “la única salida a la coyuntura actual es mediante el diálogo. Celebro que Rusia haya de mostrado voluntad para entablar conversaciones en enero”.
La Unión Europea tiene poca influencia con Rusia sobre Ucrania, pero necesita seguir hablando con Putin para calmar las tensiones, indicó por su parte el primer ministro italiano, Mario Draghi.
Añadió que Europa no tiene una fuerza militar propia importante y que veía pocas perspectivas de utilizar las importaciones de gas ruso como forma de obligar a Putin a retroceder en su enfrentamiento con Ucrania.
“La Unión Europea debe intentar hoy en día, en la medida de lo posible, mantener un estado de relación con el presidente Putin”, dijo Draghi, quien añadió que aún es posible evitar “decisiones irreversibles”.