Las empresas de tecnología financiera compiten ya directamente con la banca en cuanto a tarjetas de crédito. Sin anualidades, sin comisiones de apertura, descuentos en compras por medio de comercio electrónico y, en promedio, tasas de interés más bajas, son algunas ventajas que ofrecen este tipo de cuentas digitales a los usuarios mexicanos.
A grado tal ha llegado la competencia de las fintech en el país, que las instituciones bancarias han pedido a los reguladores del sistema financiero que haya “piso parejo” en la reglamentación a estas firmas tecnológicas, sobre todo que “hagan transparentes sus costos”.
El principal mercado de las empresas fintech que ofrecen cuentas de crédito en el país son las tarjetas de estilo básico; es decir, líneas de financiamiento que en promedio van de 4 mil 500 a 15 mil pesos, mismas en las que, en diversos casos, son en las que la banca tradicional tiene los costos más altos.
De acuerdo con datos del Banco de México (BdeM), el costo anual total (CAT) de una tarjeta de crédito con línea de 3 mil a 15 mil pesos ronda 85 por ciento, mientras en el sector fintech este indicador es de 55 por ciento.
La opción en cuanto al CAT más baja dentro del mercado que ofrecen los bancos de tarjetas de crédito básicas la tiene Hey Banco, institución digital que pertenece a Banregio, con un promedio de 43.5 por ciento, según los datos del banco central.
Banorte, con el plástico Banorte La Comer, tiene la opción más alta en costo anual total, que asciende a 133 por ciento; le sigue la cuenta Azul de BBVA con CAT de 117 por ciento y la Ideal de Scotiabank, que asciende a 106.3 por ciento.
Contrario a este tipo de ofertas, las fintech como Nu, controlada por el neobanco brasileño Nubank, tiene un CAT en su cuenta de crédito que va de 30 a 40 por ciento, según el comportamiento y el historial de cada consumidor. Ésta ofrece poder diferir todas las compras a meses sin intereses.
Otra opción disponible en el mer-cado es la tarjeta Rappi Card, dela plataforma de envíos Rappi, cuyo CAT es similar, y entre sus benefi-cios está la devolución hasta de 6 por ciento en cada compra con su plástico.
Banqueros alzan la voz
Ante la competencia, diferentes líderes de la banca han pedido a los reguladores financieros del país que haya igualdad de condiciones en las reglas para las fintech y los bancos.
Recientemente, Ana Botín, presidenta de Santander a nivel global comentó: “Damos la bienvenida a la competencia, no nos asusta, pero también damos la bienvenida a reglas de juego parejas, que si yo doy un servicio de pagos y me regulan de una manera, deben hacerlo también con las fintech o bigtech, que sean los mismos requerimientos de capital, operativos, de residencia y sensibilidad de los datos. La regulación debería ser sobre lo que haces y no quién eres o cómo te llamas”.
Daniel Becker, presidente de la Aso-ciación de Bancos de México, expu-so: “si algo hemos trabajado es la no opacidad de los costos a los usuarios (…), queremos también el mundo fin-tech –el cual agradecemos que exista porque nos obliga a ser mejores cada día– tenga los mismos elementos y requisitos, un piso parejo”.