Odontología, radiología digital, reproducción asistida y terapia láser son sólo algunos de los servicios que da el Centro Ecuestre de Alto Rendimiento (CEAR) de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena)a sus “caballos atletas”, que ya se preparan para los próximo Juegos Olímpicos de París 2024.
El coronel médico veterinario José Alejandro Barrera Morales, jefe de enfermería hípica del CEAR, explicó que su misión es cuidar la salud de los caballos que participan en las tres disciplinas olímpicas: salto, adiestramientos y concurso completo de equitación.
Se trata en su mayoría de ejemplares de la raza Santa Gertrudis, 100 por ciento mexicana, generada desde hace años en el criadero militar de ganado de la Sedena en Chihuahua.
Actualmente, los caballos de competencia son producto de la reproducción asistida, donde biólogos especializados intervienen para seleccionar a los ejemplares con las mejores características genéticas.
La teniente veterinaria Lorena Villarreal detalló que para ello se buscan óvulos de yeguas seleccionadas, que son fertilizados con semen de caballos ganadores de competencias, y gestados por una segunda hembra receptora, para no afectar a la donadora.
A los cuatro años de edad, los potros comienzan su entrenamiento, que implica un tratamiento de medicina veterinaria deportiva, para prevenir y tratar lesiones y mejorar sus resultados.
La atención incluye odontología, pues la boca es donde se coloca el filete o freno, con el cual el jinete conduce a su montura. “Es la comunicación con el caballo”, comentó el coronel Barrera, y por eso no debe tener lesiones.