La pandemia de Covid no sólo afectó la salud pública, también tuvo un fuerte impacto en la vida cívica. Javier Hidalgo, director del Instituto del Deporte de la Ciudad de México, habla sobre la importancia de recuperar espacios urbanos, de reapropiarse de la calle con actividades colectivas. Ser comunidad, en resumen.
Después de finalizado el Medio Maratón de la ciudad, Hidalgo reconoció el entusiasmo mostrado no sólo por los competidores, sino también por los espectadores y todo aquel habitante que de algún modo trata de retomar la vida cuando casi se han cumplido dos años de pandemia.
“Fue una catarsis cívica”, señala Hidalgo; “en el Medio Maratón se rompieron récords de ruta, tanto en la rama varonil como femenil, pero el mayor fue el del ánimo de la gente. La alegría que le imprimieron los habitantes de esta ciudad”.
La carrera que se disputó el domingo sobre Paseo de la Reforma convocó a 20 mil corredores y fue un éxito en la demanda. Las inscripciones se agotaron de inmediato y sólo se había reservado un número limitado de cortesías. Los organizadores decidieron ponerlas a disposición de los ganadores de una carrera en la Ciudad de México que no tuvo mucha promoción.
“Acudieron a la carrera 4 mil participantes sólo por la ilusión de ganar una cortesía para el Medio Maratón”, dice Hidalgo; “fue un acierto, porque una de esas cortesías fue del competidor que quedó en el tercer lugar el domingo”.
No sólo es el deseo de volver a practicar deporte, sino también de estar como colectivo y disfrutar de una ciudad, volver a la vida social en el espacio público.
“Fue un mensaje de vida, porque esto es el reflejo del deseo de la gente, las ganas de vivir. Hay una urgencia de volver a hacer comunidad”, finalizó.