Mientras los hombres mexicanos que viven en Estados Unidos han recuperado todos los empleos que perdieron durante la parte más crítica de la pandemia y hasta han sumado nuevos, las mujeres tienen 7 por ciento menos puestos que antes de la emergencia sanitaria, lo que habla de la desigualdad y de las mayores afectaciones que ha enfrentado el género responsable de un cuarto de las remesas al país.

Según datos del Foro de Remesas de América Latina y del Caribe, del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), en febrero de 2020, es decir, justo antes de que se declara al coronavirus como pandemia, había 4 millones 452 mil 31 hombres mexicanos trabajando en EU, cifra que cayó a 3 millones 939 mil 583 en junio de ese año, para posteriormente recuperarse y cerrar octubre de 2021 en 4 millones 726 mil 524.

En contraste, en febrero del año pasado las mujeres con trabajo en EU eran 2 millones 437 mil 462, nivel que descendió hasta un millón 932 mil 414 en mayo de ese año como consecuencia de la pandemia, para luego ir subiendo hasta 2 millones 306 mil 609 mil al término de octubre de este año. Lo cual significa que más de un año después, el empleo de las mujeres se ha quedado rezagado.

Para Jesús Cervantes González, coordinador del foro del Cemla, el déficit en los empleos de las mujeres en EU se explica por una mayor ocupación de éstas en los sectores de servicios, mientras que en los hombres hay una fuerte concentración en la industria de la construcción, sector que presentó un significativo repunte en sus ocupaciones debido a la reactivación económica de ese país.

Asimismo enfatizó que la recuperación del empleo de los trabajadores mexicanos inmigrantes ha sido relativamente mejor que la registrada en la economía estadunidense en su conjunto, particularmente en el caso de los hombres, pero en general en ese país el avance del empleo ha sido menos favorable en las mujeres.

De acuerdo con el Cemla, las mujeres mexicanas que radican en otros países (principalmente EU) envían 25 por ciento del monto total de las remesas familiares que llegan anualmente al país; es decir, uno de cada cuatro dólares que ingresan a México por ese concepto es producto del trabajo femenino.

Datos del Banco de México indican que entre enero y octubre del presente año el flujo de remesas ascendió a 42 mil 168 millones de dólares, cifra que rompió el récord para todo un año desde que hay registros, el cual se dio en 2020 con 40 mil 604 millones de dólares.

Ocupadas en sectores rezagados

De acuerdo con información recopilada por el Cemla, 478 mil 449 mujeres mexicanas en EU, es decir, el equivalente a 20 por ciento del total, trabajan en el sector de servicios de salud y asistencia social y educativos; mientras que otras 423 mil 532, el 17.8 por ciento del total, lo hace en alimentos recreación y hospedaje.

Lo anterior significa que casi cuatro de cada 10 mujeres mexicanas que laboran en territorio estadunidense lo hacen en algún rubro del sector de servicios.

En tanto, un millón 469 mil 300 migrantes hombres, 31.4 por ciento del total que labora en EU, lo hace en la industria de la construcción; otros 580 mil 231 mil, equivalente a 12.4 por ciento del total, se desempeñan en alguna empresa manufacturera. Es decir, casi 45 por ciento tienen alguna actividad que ha mostrado mejor recuperación luego del primer año de la pandemia.

Para dimensionar el tamaño del número de trabajadores mexicanos en EU, el Cemla destacó que al cierre de octubre pasado la cantidad de migrantes ocupados en aquel país fue equivalente a 33.9 por ciento del número de trabajadores asegurados en el IMSS en México, con porcentajes de 37.2 por ciento en el caso de los hombres y de 28.6 por ciento en el de las mujeres.