Tuxtla Gutiérrez, Chis., En medio del hermetismo, este sábado salió del Servicio Médico Forense (Semefo) el primer cuerpo de los 56 migrantes muertos en el accidente de la semana pasada en la autopista Chiapa de Corzo-Tuxtla Gutiérrez presuntamente para ser trasladado a Guatemala.
El cadáver fue sacado a las 15 horas en una carroza gris, minutos después de que el cónsul de Guatemala en Tuxtla Gutiérrez, Mario René Azmitia Saldaña, salió de la morgue en un vehículo azul.
Con el argumento de que toda la información relacionada con el caso se está manejando a través de la dirección de comunicación del Ministerio de Relaciones Exteriores de su país, se negó a responder hacia dónde sería llevado el cadáver que salió en la carroza de la morgue, ubicada a las afueras de la capital.
–¿Cuántos cuerpos serán traslados este sábado? –le preguntó una reportera.
–No tengo la información. No puedo dar declaraciones.
De acuerdo con informes oficiales, en el Semefo de Tuxtla Gutiérrez presuntamente fueron resguardados 20 de los 56 cadáveres, mientras que los restantes fueron llevados a municipios de la costa, por falta de espacio.
Por la tarde, el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, Fabio Martínez Castilla, ofició una misa en el punto en el que ocurrió el accidente el 9 de este mes, perteneciente a la colonia El Refugio, municipio de Chiapa de Corzo.
Ante más de 100 personas que se congregaron en un espacio al aire libre junto a la autopista, dijo que “hoy todos somos invitados, desde el más pequeño hasta el Presidente de la República, a amar y cuidar la vida, a respetar la dignidad y la vida de toda persona, de la nación de donde sea y de la edad que tenga”.
Agregó que el sitio en el que murieron los migrantes, guatemaltecos, en su mayoría, será un espacio de oración y se ha programado que los días 9 de cada mes se realicen misas, rosarios, novenarios o una oración para que la tragedia no sólo sea recordada por un año, sino por siempre.
Exigió a las autoridades que “se haga una investigación seria y profunda e ir a las raíces, porque si no, no habrá solución, se va a encontrar corrupción y quiénes son los que se benefician, porque se dice que cada migrante paga más o menos 10 mil dólares. Supongan que den en cada retén unos 30 mil o 40 mil dólares.”