Ciudad de México. El proyecto piloto del gobierno mexicano, la Organización Internacional para las Migraciones y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados, con el objetivo de la regularización migratoria e integración en México de indocumentados haitianos, representa una respuesta inicial a la coyuntura. Sin embargo, los organismos internacionales consideraron que para hacer frente a los flujos migratorios mixtos es necesario implementar alternativas de regularización migratoria para personas con distintas necesidades y perfiles.
VIDEO: Acuerdan regularizar la estancia de la caravana migrante.
De forma paralela, se debe fortalecer el sistema de asilo y ofrecer vías nuevas de regularización, sin embargo, no resolverá por sí solo el reto. La OIM y el Acnur insisten en la importancia de seguir buscando alternativas de regularización migratoria de más amplio alcance”.
Consideran que la falta de acceso a un estatus migratorio regular implica para las personas migrantes “la falta de acceso a los derechos, la separación de las familias, la violencia de género y las desigualdades, así como los desastres, los efectos adversos del cambio climático y la degradación medioambiental”.
En un posicionamiento sobre el acuerdo, ambos organismos señalan que los haitianos podrán acceder al programa de integración local, en las entidades donde se encuentren, aun cuando no sean solicitantes de la condición de refugiado. De acuerdo con el programa, la OIM se responsabiliza de identificar los perfiles de las personas elegibles para incorporarse de acuerdo con los criterios que fije la autoridad migratoria mexicana y con la participación de la embajada haitiana.
Asimismo, puntualizan, el Acnur estará a cargo del traslado a las entidades donde sea más factible la recepción de las personas, así como de facilitar la vinculación laboral y su inserción escolar, y brindará acompañamiento en su proceso de integración durante el primer año.