Los datos a nivel municipal presentados el miércoles por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) “muestran las dos causas principales de la pobreza en México”, que son la precariedad laboral y la “exclusión crónica” de la región sur-sureste del país, que no tiene opciones de desarrollo económico ni acceso a derechos básicos.
Así lo indicó la organización civil Acción Ciudadana Frente a la Pobreza (ACFP), la cual subrayó la necesidad de construir acuerdos frente a la precariedad y la desigualdad, para garantizar la creación de empleos con remuneración suficiente, un sistema universal de salud y seguridad social, así como servicios de educación de calidad.
En un comunicado con motivo de la presentación de la Medición multidimensional de la pobreza a nivel municipal 2020, expuesto por el Coneval hace unos días, el colectivo puntualizó que entre los datos que más llaman la atención de dicho estudio es que en apenas 100 de los 2 mil 466 municipios del país viven 22.3 millones de personas pobres, equivalentes a casi 40 por ciento del total.
En esas demarcaciones, las dos carencias más importantes son el acceso a la seguridad social –que afecta a 29 millones de personas, 48 por ciento de su población– y el ingreso económico insuficiente para pagar la canasta básica alimentaria, el cual perjudica a 28.2 millones de personas, equivalente a 47 por ciento del total de habitantes.
De igual forma, ACFP resaltó que en 500 municipios, la pobreza afecta a 90 por ciento de sus pobladores, y de ese total, en 16 de ellos la precariedad perjudica a 99 por ciento.
Por otra parte, la organización destacó que en las 500 demarcaciones territoriales con mayor porcentaje de pobreza viven 6 millones 119 mil personas, de las cuales 43 por ciento se encuentran en un escenario de pobreza extrema. En esos mismos sitios, apenas 0.8 por ciento de la población –sólo 50 mil 250 personas– es “no pobre y no vulnerable”.
Asimismo, el colectivo resaltó que de los 500 municipios con mayor pobreza, 482 se encuentran en estados del sur y sureste con alta población indígena: en Oaxaca están 269; en Puebla, 58; en Chiapas, 57, y en Veracruz, 49.
“En estos municipios la pobreza es crónica. Se arraiga y se reproduce durante el ciclo de vida de las personas por las condiciones de exclusión para el ejercicio de derechos sociales básicos”, lamentó ACFP.