Viena. Los diplomáticos europeos involucrados en las conversaciones para salvar el acuerdo nuclear de Irán dijeron este viernes que se lograron "algunos avances técnicos", pero advirtieron que se está "llegando rápidamente al final del camino para esta negociación".
"En las últimas 24 horas se han hecho algunos avances técnicos", pero "queda muy poco espacio para estas negociaciones", indicaron en un comunicado los representantes de Francia, Alemania y el Reino Unido (E3) tras el final de un ciclo de conversaciones en Viena.
"Estamos llegando rápidamente al final del camino para esta negociación", agregaron expresando que la pausa pedida por Irán es "decepcionante".
El jefe de la delegación iraní, Ali Bagheri afirmó su deseo de volver a Teherán, dijo el E3, que lamenta "una pausa decepcionante" en las negociaciones, por una razón indeterminada.
Reunidos con sus homólogos de Irán, China y Rusia, cerraron la séptima sesión después de varios días de discusiones "duras e intensas" según Teherán. Aunque no han fijado fecha para una nueva cita, esperan poder verse antes de final de año.
El conjunto de los demás socios estaban "listos para seguir las discusiones", señalaron, y pidieron a los iraníes "retomarlas rápido" y acelerar su ritmo.
"Hemos logrado buenos avances esta semana", estimó en Twitter Ali Bagheri antes de cerrar las conversaciones y precisar que estas "van a continuar después de una pausa de unos días".
Las conversaciones (retomadas a finales de noviembre) -- que buscan que Estados Unidos vuelva al acuerdo internacional y que Irán se comprometa a frenar sus actividades nucleares -- se iniciaron en abril, pero estuvieron detenidas durante varios meses por la elección de nuevo gobierno con una línea más dura en Teherán.
Los diplomáticos de la UE y de Estados Unidos han sido cautelosos y los delegados del Reino Unido, Francia y Alemania - que forman parte del acuerdo internacional - advirtieron el lunes que se está perdiendo un "tiempo precioso" lidiando con "posturas inconsistentes de Irán".
Estados Unidos, que bajo el gobierno de Donald Trump se retiró del acuerdo en 2018 y reinstauró las sanciones contra Irán, participa de forma indirecta en el diálogo.
Tras la retirada de Estados Unidos, Irán dio varios pasos para aumentar sus actividades nucleares.
Pérdida de la memoria de una cámara
A comienzos de año, Teherán también comenzó a restringir las actividades del organismo de la ONU que supervisa las actividades nucleares, el OIEA.
El miércoles Teherán y el OIEA, con sede en Viena, anunciaron que alcanzaron un acuerdo para reemplazar las cámaras en una planta que fabrica centrifugadoras en Karaj, que según Irán fueron dañadas en junio en un ataque que atribuye a Israel.
El director general del OIEA, Rafael Grossi, dijo este viernes que tiene sus "dudas" sobre una unidad de memoria perdida de una cámara del complejo, especificando que no hay un acuerdo con Irán sobre el tema.
A la pregunta de si este dispositivo podría haberse perdido en el ataque de junio, Grossi respondió que tienen "dudas al respecto".
"Por eso les preguntamos '¿Dónde están?'", señaló el funcionario que dijo esperar que tengan una respuesta, ya que es muy extraño que hayan desaparecido.
Grossi admitió que existe una "preocupación" por la pérdida de estos datos en Karaj pero agregó que hay "muchos métodos y técnicas" que pueden ayudar a reconstruir el puzle.
"No se olviden que esta es una planta que conocemos muy bien, sabemos que equipamientos hay", indicó.