Buenos Aires. La oposición derechista, ultraderechista y los diputados de la izquierda trotkista votaron ayer en contra el presupuesto para 2022, presentado por gobierno del presidente Alberto Fernández, con lo que pusieron en práctica su anunciado plan de golpear para debilitar a esta administración, en el marco de negociaciones oficiales con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por el préstamo de 57 mil millones de dólares entregado por este organismo al ex presidente Mauricio Macri, a sabiendas que no lo podría pagar, para ayudarlo en su campaña hacia una posible reelección.
Fue la primera vez, desde la recuperación de la democracia en 1983, que se rechaza un presupuesto aunque en 2010 no hubo quorum para votarlo, en otro juego de la oposición en el Congreso que había ganado la coalición derechista Cambiemos tratando de debilitar a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner , quien sin embargo triunfó en las elecciones presidenciales de 2011 con 54 por ciento de los votos.
El heterogéneo conglomerado opositor está compuesto mayoritariamente por la coalición macrista Juntos por el Cambio (Cambiemos), y tiene apoyo en diez bancadas como el Frente Federal y el Frente de Izquierda de los Trabajadores, que siempre termina por favorecer a la derecha, y votó contra el presupuesto yal igual que dos grupos políticos de una ultraderecha minoritaria que se considera “libertaria”. Fue evidente que se trató de impactar negativamente las negociaciones del gobierno con el FMI, y golpear toda la iniciativa gubernamental.
Sin embargo el gobierno tiene la posibilidad de continuar con el presupuesto actual el próximo año y el presidente Fernández habló esta tarde con las autoridades del FMI, mientras que el ministro de Economía Martín Guzmán se reunió con el mandatario y se mantuvo en comunicación con el Fondo, que ha reconocido que con ese préstamo a Macri se violaron las normas de ese organismo.
En tanto, en las elecciones internas de la Unión Cívica Radical también dividida en estos días fue elegido Gerardo Morales, gobernador de Jujuy, acusado por mantener detenida desde 2016 a la dirigente social Milagro Sala y a otras militantes de la organización Tupac Amaru, manejando la justicia en su provincia mediante causas falsas. Morales etá acusado de corrupción y persecución entre otros delitos.
Rebelión popular en Chubut
La población de la provincia sureña de Chubut se movilizó en una fuerte rebelión contra la sanción de la ley que autoriza la explotación minera por empresas transnacionales en ese territorio. Unos 16 edificios públicos fueron incendiados, incluso se el intentó quemar la sede gubernamental al exigir el veto a la norma promulgada por el gobierno de Mariano Arcioni, quien ordenó la represión contra los pobladores, que dejó heridos y detenidos, mientras que las movilizaciones continúan en toda la provincia.
Los medios locales reflejan que hay puertas destrozadas, archivos quemados, computadoras , fotocopiadoras y muebles arrojados a las calles ya que varios edificio fueron tomados.
Rawson, la capital de Chubut, fue la que sufrió mayores daños tanto en el Tribunal Superior de Justicia y otros edificios públicos, incendiados por lo ambientalistas. La situación grave continuaba esta noche mientras la población está dispuesta a continuar su protesta porque se trata de deender el agua y otros recursos amenazados. Los ambientalistas llamaron “traidor” al gobernador Arcioni quien se comprometió a impedir el ingreso de las grandes mineras a su provincia.