Toluca, Méx., La sala regional Toluca del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) revocó ayer el triunfo del priísta David Sánchez Isidoro en la elección de presidente municipal de Coacalco, celebrada en junio pasado.
Tras anular 13 casillas, se revirtió el resultado, lo que dio la victoria a Darwin Eslava Gamiño, postulado por la coalición Juntos Hacemos Historia, integrada por los partidos Morena, del Trabajo y Nueva Alianza.
A pesar de que Sánchez Isidoro ya había rendido protesta al cargo la semana pasada, será el morenista Darwin Eslava quien encabece el municipio a partir del primero de enero de 2022, con lo que cumplirá su segundo periodo como alcalde de Coacalco.
La resolución de los magistrados de la sala regional estuvo dividida, pues dos votaron por la anulación de las casillas y por declarar inelegible a Sánchez Isidoro, y uno votó en contra del proyecto.
La elección de Coacalco fue una de las más cerradas en el estado, pues la diferencia entre el primer y segundo lugares fue de menos un punto porcentual (apenas 695 votos), pues el priísta obtuvo 45 mil 921 sufragios contra 45 mil 226 del morenista.
El tribunal local sólo anuló 14 casillas, pero esto no revirtió el triunfo de David Sánchez. Ahora, con la anulación de 13 casillas más, se modificaron los resultados y ganó Darwin Eslava.
Durante más de tres horas los magistrados de la sala regional del TEPJF debatieron sobre las anomalías que se presentaron en el desarrollo de los comicios.
Gran parte el debate se centró en la elegibilidad del abanderado del tricolor, pues se informó que el pasado 21 de junio un juez de control condenó a Sánchez Isidoro a tres años y cuatro meses de prisión por el delito de desacato, pues en más de 12 ocasiones, como alcalde en el periodo 2012-2015, no atendió una resolución de un juzgado de amparo para pagar un laudo que data de 2009.
La pena de prisión fue conmutada por trabajo en favor de la sociedad durante el plazo señalado, hecho que fue considerado por los magistrados Juan Carlos Silva Adaya y Marcela Fernández Domínguez, presidenta de la sala regional del TEPJF, suficiente para determinar que el priísta “no tenía un modo honesto de vivir” y no cumplía con el requisito de “probidad” que exige la ley para asumir el cargo de presidente municipal.
El magistrado Alejandro Avante rechazó estos argumentos y dijo que el propio juez de control concedió a Sánchez Isidoro beneficios como no suspender sus derechos políticos, por lo que no había razón para considerarlo inelegible.
Sobre las irregularidades detectadas durante la elección efectuada en junio de este año, se dijo que varios delegados municipales fungieron como funcionarios de casilla y pudieron haber presionado a los electores para que votaran por el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Alejandro Avante señaló que ese argumento tampoco era razonable, sobre todo porque los delegados municipales fueron designados por un ayuntamiento emanado de Morena, y no habría cómo fundamentar que éstos ejercieron presión para votar por el PRI.
El tercer argumento para revocar el triunfo del tricolor fue que Morena no tuvo acceso a copias certificadas de las actas de escrutinio, a pesar de que las solicitó en tres ocasiones al Instituto Electoral del Estado de México, lo que vulneró su derecho a una buena defensa para impugnar.
David Sánchez Isidoro aún puede recurrir a la Sala Superior del TEPJF, órgano que tendrá hasta el 31 de diciembre para resolver.