Ciudad de México. En 2020, año que se declaró estado de emergencia sanitaria por Covid-19, la producción del sector salud alcanzó su mayor valor monetario en su historia; mientras que en el hogar recayó gran parte de los cuidados de salud (trabajo no remunerado), reveló la Cuenta Satélite del Sector Salud de México 2020, que dio a conocer este martes el Inegi.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el producto interno bruto (PIB) del sector salud en México reportó un monto de 1.5 billones de pesos en el 2020, equivalente a 6.5 por ciento del PIB nacional, en contraste con el 5.6 por ciento que representó en el 2019, año anterior al inicio de la pandemia por SARS COV2.
“En un contexto de pandemia, el PIB ampliado del sector salud alcanzó 6.5 por ciento del PIB nacional en 2020, el mayor valor en su historia”, precisó Julio Santaella, presidente del Inegi.
Dicho porcentaje se compone por el valor producido por los bienes y servicios finales relacionados con la prevención, recuperación y mantenimiento de la salud humana, de 4.6 por ciento de contribución y el valor del trabajo no remunerado en salud, de 1.9 por ciento.
El trabajo no remunerado en cuidados de salud pasó de 26.3 por ciento en 2019 a 28.7 por ciento en el mismo periodo. Se observó que se presenta un desplazamiento en los cuidados de salud hacia los hogares.
Las actividades del sector salud que tuvieron crecimiento son las actividades auxiliares, entre las que se encuentran los laboratorios clínicos, que crecieron 16.1 por ciento el año pasado y los servicios hospitalarios, con un aumento de 2.9 por ciento.
En contraste, el cierre temporal de establecimientos de actividades no esenciales impactó en la producción de bienes de apoyo para la salud, que disminuyeron 4.5 por ciento respecto 2019.
Por su parte en los hogares recayó gran parte de los cuidados de salud, considerando las medidas de confinamiento para enfrentar la pandemia por Covid-19, por lo que en 2020 el valor del trabajo no remunerado en salud (TNRS) se ubicó en 1.9 por ciento del PIB nacional, que contrastó con la participación de 1.5 por ciento presentada en 2019.
Para 2020 se observó un aumento en los cuidados especializados, al pasar de 53.9 a 57.9 por ciento de 2019 a 2020; mientras que los cuidados preventivos tuvieron una caída al pasar de 7.8 a 2.9 por ciento.