Monterrey, NL. Tres migrantes de Haití golpearon al fundador del albergue Casa Indi —donde se da refugio y apoyo a migrantes centroamericanos y caribeños—, el padre Felipe de Jesús Sánchez Gallegos, así como a otros tres habitantes del lugar, quienes intentaron defenderlo.
Los atacantes no han sido detenidos, aunque elementos policiales estatales de Fuerza Civil realizaron un operativo de búsqueda en los alrededores del albergue.
De acuerdo a Denis Martínez, migrante de Honduras y encargado voluntario de la limpieza del albergue, la agresión inició cuando él solicitó a tres migrantes haitianos que fueran más limpios, ya que la calle en donde descansan, frente al albergue, tenía basura acumulada.
La agresión fue cometida alrededor de las 9:00 de la mañana, en el espacio entre la parroquia y el albergue, donde diariamente cientos de migrantes reciben alimento en forma gratuita.
Las tres personas haitianas se molestaron ante la petición y comenzaron a golpear a Martínez, por lo que el padre Felipe intervino; sin embargo, también fue agredido a golpes.
Ante el ataque, otras tres personas de Honduras que se encontraban en el lugar intervinieron, pero también fueron golpeados; uno de ellos perdió varias piezas dentales en el altercado.
Elementos de Fuerza Civil que se encuentran apostados afuera del albergue, ubicado en la colonia Bella Vista, de Monterrey, detuvieron la agresión, pero los atacantes lograron huir.
Según reportes preliminares, el párroco se encuentra estable y no requirió atención médica.
El 7 de diciembre el padre Felipe informó que en el albergue se encuentran cerca de 800 personas haitianas, a quienes se les brinda tres comidas al día, así como refugio para pernoctar.