Mineápolis. Dalvin Cook corrió para 205 yardas y dos anotaciones, tras recuperarse más pronto de lo esperado de una lesión de hombro, y los Vikingos de Minnesota se impusieron el jueves 36-28 a los Acereros de Pittsburgh.
Minnesota aseguró el triunfo al forzar un pase incompleto en la zona de anotación, lo que representó la última jugada del duelo.
El envío de Ben Roethlisberger a Pat Freiermuth fue acertado, pero Anthony Barr y Harrison Smith hicieron taclearon al jugador de Acereros en el momento justo, para que el balón se escapara. Para Pittsburgh fue un final desgarrador luego de un increíble esfuerzo de regreso ya que su ofensiva cobró vida tarde.
Los Vikingos (6-7) consiguieron así una victoria crucial después de que casi dilapidaron la ventaja de 29-0 que tenían en el tercer cuarto.
Todos los partidos de Minnesota en la campaña, salvo uno, se han decidido por ocho puntos o menos.