Ciudad de México. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) firmó un acuerdo de colaboración en estudios y monitoreo de clima espacial con el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales de Brasil, la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de Universidad de Buenos Aires, y la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile.
En el acto protocolario, que se realizó de manera virtual, representantes de estas instituciones coincidieron en que un consorcio como este “muestra la enorme potencialidad que tiene la investigación en temas de clima espacial para ayudar a resolver problemas que afectan en particular a la aeronavegación civil”.
El director del Instituto de Geofísica de la UNAM, José Luis Macías Vázquez, recordó que en junio de 2014 se modificó la Ley de Protección Civil en México y se incluyó en la lista de los fenómenos perturbadores a los eventos astronómicos. Esto, dijo, significa que en el país el tema del monitoreo de las tormentas solares y sus efectos en el entorno espacial del planeta “es considerado como un asunto de seguridad nacional”.
Refirió que ese mismo año se estableció el Servicio de Clima Espacial Mexicano del instituto de la máxima casa de estudios, que tiene como objetivo monitorear los efectos de las tormentas solares sobre el territorio nacional; y para 2016, con la Universidad Autónoma de Nuevo León, se estableció el Laboratorio Nacional de Clima Espacial.
El director del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales, de Brasil, Clezio Marcos de Nardin, expuso que esta integración es para la región un asunto de suma importancia, pues vivimos un tiempo en que la tecnología y varias ramas de la economía pueden ser vulnerables a los efectos del clima espacial.
El coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, William Lee, destacó que el eje del protocolo tiene que ver con la investigación y generación de conocimiento, prevención y mitigación de riesgos, así como recomendaciones de política pública.