Ciudad de México. El nivel de progreso social en México es muy contrastante en las diversas regiones del país, pues mientras en la zona norte dicho índice alcanza los puntajes más altos, en la sureste sigue habiendo un claro rezago, debido a la falta de infraestructura y servicios básicos y a la mayor presencia del trabajo informal.
Así lo reveló el Índice de Progreso Social 2015-2020, elaborado por la organización civil México Cómo Vamos (MCV), en el cual se analizó el desempeño de los diversos estados y regiones de la nación, así como la forma en que éstos fueron perjudicados por la pandemia de Covid-19.
En el estudio, el colectivo explicó que el índice de progreso social (IPS) se trata de una “medición holística” de la situación de un país o entidad, que no se basa sólo en aspectos económicos, sino que también considera el nivel de cobertura de los derechos sociales básicos, como acceso a la alimentación, la salud, el agua, la educación y la vivienda, entre otros.
El documento de MCV agrupa a las diversas entidades de la nación en nueve regiones: Bajío, La Laguna, Sureste, Valle de México, Golfo de México, Mar de Cortés, Occidente, Norte y Península de Yucatán, pero también presenta análisis individuales de cada entidad y su nivel de desempeño en cada una de las categorías estudiadas.
Uno de los principales hallazgos del estudio, indicó en entrevista Axel González, analista de la organización, es la gran disparidad que aún existe entre las diferentes regiones de la República, como lo comprueba el hecho de que la zona norte (Chihuahua, Nuevo León y Tamaulipas) registró en 2020 un IPS de entre 63.7 y 72.5 puntos, de 100 posibles, mientras la sureste (Guerrero, Oaxaca y Chiapas) apenas tiene entre 48.4 y 51 puntos.
Las entidades con mejor IPS el año pasado fueron Nuevo León, Querétaro, Aguascalientes, Ciudad de México y Yucatán, mientras que las cinco con el peor desempeño fueron Tabasco, Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Guerrero.
De igual manera, el estudio documentó que entre 2019 y 2020, 21 estados sufrieron disminuciones en su IPS, con excepción de Colima, Durango y Querétaro, las cuales registraron una mejora en su calificación, aunque ésta fue menor a un punto.
A decir de los autores del informe, el retroceso “es consistente con la contracción del tamaño de la economía mexicana en 2020 tras los confinamientos por la pandemia” de Covid-19, por lo que las cifras de 2021 probablemente revelarán que este año será el tercero consecutivo con retrocesos en el IPS.
González recalcó que este análisis puede ser una herramienta útil para definir las políticas públicas que se aplicarán para combatir la pobreza, las cuales deben estar basadas en las características y necesidades propias de cada región y entidad.