Migrantes haitianos que fueron trasladados por el Instituto Nacional de Migración (INM) de la sureña fronteriza Tapachula, Chiapas, a otros puntos del país, han sido dejados “a la deriva”, de acuerdo con testimonios.
La falta de albergues y capacidad de atención en algunas ciudades a las que fueron removidos han provocado que los migrantes se instalen en lugares públicos para dormir a la intemperie, además, señalaron, tienen dificultades para conseguir alimentos, agua y otros servicios básicos.
El INM estima que a dos semanas de haber iniciado esta operación ha transportado en autobuses alrededor de 15 mil haitianos a diversos sitios del país. Una vez que llegan a sus destinos son conducidos a las oficinas del INM en la entidad, donde se realiza el proceso de regularización migratoria.
Esta estrategia de la autoridad migratoria tiene por objeto “despresurizar” la situación en Tapachula, que de acuerdo con fuentes del INM se encontraba al límite con la alta presencia de migrantes, sobre todo haitianos y centroamericanos, que habían tramitado en esa urbe de la frontera sus solicitudes de asilo ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados.
El instituto detalló que les ofrece una visa de visitante por razones humanitarias, con vigencia de un año, que les permite transitar libremente por toda la República y les da posibilidad de obtener empleo en apego a la legislación; así como información sobre la ciudad a la que han llegado.
Sin embargo, algunos migrantes denunciaron que no se les da a conocer que con esta regularización pierden la oportunidad de solicitar asilo y a muchos no se les dice a qué sitio se les conducirá.
Rosalinde, joven haitiana que llegó a México desde Chile, señaló que “en ningún momento me informaron que se perdería el asilo. En el estadio (de Tapachula) nos subieron a los camiones y sólo nos dijeron que iríamos a otra ciudad, a la regularización (migratoria), pero no me dijeron a cuál”.
Ella y su hija de dos años de edad fueron trasladadas por el INM a Campeche. En entrevista telefónica denunció que decenas de sus compatriotas fueron conducidos a unos campos deportivos. “Todo está improvisado, dormimos en el suelo, nos protegemos con lo que podemos. No hay agua suficiente y la comida escasea”.
Otro de los migrantes quien afirmó llamarse Claude y está en Puebla, se manifestó decepcionado por la “falta de apoyo. Nos prometieron otras cosas y sólo nos trajeron para acá (Puebla). Sólo deseo mejores oportunidades, ya sea en México o Estados Unidos, pero ha sido muy duro. En Tapachula era imposible estar, pero aquí no hay gran diferencia, sigo en la calle, con peligros y hambre”.
Algunos de los estados a los que el INM ha conducido o llevará a los migrantes haitianos son: Morelos, Puebla, Edomex, Hidalgo, Guanajuato, Colima, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Nayarit, Aguascalientes, Campeche, SLP, Zacatecas, Durango, Sinaloa y Quintana Roo.