Chilpancingo, Gro. La Coordinadora de Comisarios Ejidales y Comunales del estado de Guerrero demandó a la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, ejercer un presupuesto de al menos mil millones de pesos para resolver los problemas del campo guerrerense, afirmó Carlos García, representante de los productores del municipio de Atoyac de Alvarez.
En conferencia de prensa esta mañana, a la que asistieron representantes campesinos de las ocho regiones de la entidad, dijo que para el 2021, el gobierno estatal destinó al tema agrario un presupuesto de 125 millones de pesos “que apenas representa 0.25%, el gobierno aplicó no ni siquiera el 1 por ciento”.
En este caso, la Coordinadora de Comisarios, a partir de los acuerdos tomados en asambleas y talleres, “consideramos que para el 2022 el presupuesto que se debe asignar debe ser de más de mil millones de pesos, contra los 125 que al parecer es lo que se está proponiendo por parte del ejecutivo estatal”.
Por su parte Arturo García Jiménez, productor de la Costa Grande, anunció que para analizar este y otros problemas del campesinado, se está convocando a la Segunda Convención Campesina de Guerrero, a realizarse el próximo 8 de diciembre en el municipio de Zumpango de Neri, ubicado a 10 kilómetros de la capital”.
Al final de la convención “se realizará acuerdo político para impulsar el agrarismo, el desarrollo rural integral y la gobernanza”; ya se ha invitado a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, quien no ha confirmado su asistencia.
“Será una evidencia que no le interesa lo que suceda en el campo”, afirma García Jiménez
En un pronunciamiento de la Coordinara de Comisarios, afirman que “en Guerrero existe una profunda desigualdad económica y social; prevalecen altos niveles de corrupción y la violencia sigue siendo el mecanismo que grupos de poder utilizan para controlar la economía y los gobiernos locales; la democracia sigue secuestrada por una clase política ajena a los intereses del pueblo; y no existen políticas de Estado que busque revertir estos parámetros negativos”.
En lo que respecta al sector rural “la marginalidad es más extrema, si tan solo consideramos que aquí vive 42% de la población estatal, que el 80% del territorio estatal se encuentra bajo la jurisdicción de los núcleos agrarios, y que ahí se encuentra la mayor biodiversidad y recursos naturale que generan vida, economía y cultura a la entidad”.
Afirman que en Guerrero no existen políticas públicas orientadas a rescatar a los campesinos. “El presupuesto rural es mayormente paternalista, centralizado, con una pobre perspectiva de organización social, y sigue reproduciendo el modelo expoliador de la riqueza natural, la mano de obra y la cultura campesina.”
Frente a esta realidad “los comisariados ejidales y comunales, representantes legítimos de los núcleos agrarios que resguardan el 80% del territorio estatal, nos hemos organizado para impulsar a ras de tierra el movimiento de la 4T”.
En la convención se propondrá que se transparente el ejercicio público, se considere a las autoridades agrarias en la toma de decisiones y que se reconozca el cuarto orden de gobierno (el gobierno comunitario).
En la semanas pasadas se realizaron siete encuentros regionales con la finalidad de analizar los problemas agrarios, productivos, medioambientales, económicos y sociales. Captaron las necesidades, propuestas y generaron un acciones para potenciar la transformación de Guerrero.