Nicosia. El papa Francisco pidió este viernes "abrir los ojos" frente a la "esclavitud" y la "tortura" que sufren los migrantes en los campos, haciendo un paralelo con la Segunda Guerra Mundial, durante una visita en Chipre.
"Nos recuerda la historia del siglo pasado, de los nazis, de Stalin, y nos preguntamos cómo pudo ocurrir. Pero lo que ocurrió en el pasado está ocurriendo hoy en las costas vecinas (…) Hay lugares de tortura, gente que se vende. Lo digo porque es mi responsabilidad abrir los ojos", dijo el Papa durante una oración ecuménica con migrantes en Nicosia, la capital chipriota.
El Pontífice llegó a la dividida isla mediterránea el jueves, en un viaje de cinco días que incluirá también a Grecia.
VIDEO: La crisis migratoria marca el viaje papal a Chipre y Grecia.
Se trata de la segunda visita de un papa a Chipre, una isla poblada especialmente por cristianos ortodoxos, tras la realizada por Benedicto XVI en 2010.
Con este viaje, el número 35 desde su elección en 2013, el Papa argentino quiere atraer la atención sobre el tema migratorio, un problema mayor en Chipre y en la zona, que crea tensiones en la Unión Europea.
Las autoridades de Chipre aseguran que reciben el mayor número de solicitudes de asilo de la Unión Europea en comparación con su población, unos 10 mil durante los 10 primeros meses del año.
Horas antes de la oración, unas 7 mil personas asistieron a la misa ofrecida por el Pontífice en el estadio municipal de Nicosia, según los organizadores.
Durante la misa, el Papa reiteró sus llamados a la "fraternidad" y al "diálogo". Miles de fieles congregados en el lugar ondeaban banderas libanesas, argentinas e, incluso, filipinas.