La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) urgió a las autoridades de los diversos niveles de gobierno a fortalecer las acciones destinadas a la protección y garantía de los derechos humanos de las personas que viven con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y redoblar esfuerzos para garantizar, de manera efectiva y universal, el acceso a los servicios de salud relacionados con su prevención y control.
En el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, que se conmemora hoy, destacó que en el marco de la pandemia de Covid-19 durante 2020, en el país disminuyó el número de pruebas de detección de VIH contabilizando un total de 501 mil 868, cifra que tuvo una recuperación al segundo semestre de 2021 con 789 mil 552. Además, indicó que si bien se tienen diferentes métodos de prevención, como el condón, la Profilaxis Preexposición (PrEP) y la Profilaxis post Exposición (PEP), “no existen estrategias claras para que las personas puedan obtener de manera constante e ininterrumpida estos insumos de cuidado y conservación de la salud”.
En este sentido, consideró urgente reactivar los servicios que comprenden la atención integral del VIH, tales como las pruebas confirmatorias de diagnóstico y las de laboratorio necesarias para el puntual seguimiento del estado de salud de las personas que viven con el virus.
Asimismo, la CNDH resaltó que es prioritario realizar las acciones necesarias para identificar y atender las causas que generan retrasos en la distribución de los medicamentos antirretrovirales, así como establecer los procedimientos administrativos correspondientes contra de las personas servidoras públicas que con sus acciones u omisiones transgreden los derechos humanos de las personas que viven con VIH o han sido afectadas por la pandemia.
También llamó a las autoridades a implementar acciones de educación sexual integral, laica y basada en evidencia científica, acerca del autocuidado de la salud sexual, incluyendo la prevención del VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), los embarazos no deseados y en adolescentes, la equidad entre los géneros, el respeto a la diversidad sexual y de identidad de género, y la prevención de actitudes violentas relacionadas con éste.
En un comunicado, la Comisión Nacional recordó que la pandemia de Covid-19 impactó “de manera negativa las dinámicas de atención al VIH en los servicios públicos y sociales de salud a nivel mundial, generando un retroceso que se estima equivale a 10 años o más en los avances logrados en la respuesta” a este virus.
Refirió que según el Fondo Mundial, la emergencia sanitaria por coronavirus “ha sido el mayor obstáculo en la lucha contra el VIH en las últimas dos décadas. El número de personas alcanzadas por programas de prevención que proveían de condones o agujas limpias y jeringas disminuyó 11 por ciento. También hubo una disminución en la aplicación de pruebas de 22 por ciento, lo cual retrasó el tratamiento y contribuyó a la transmisión continua del virus”, según datos del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/SIDA (CENSIDA) de la Secretaría de Salud.
Llamó a reconocer la importancia que tiene la labor de las organizaciones de la sociedad civil respecto del trabajo comunitario que acerca a las poblaciones de difícil acceso los servicios de educación de la sexualidad, así como la repartición de insumos para el cuidado de la salud incluyendo la aplicación de pruebas rápidas.