El presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, advirtió que los sectores de derecha en su país han comenzando a movilizarse para dar un nuevo golpe de Estado.
“Hay una reagrupación y un reordenamiento de la derecha que está intentando reditar las acciones que evidenciamos en el país en 2019”, con el golpe llamado “suave” contra el gobierno de Evo Morales Ayma, que en palabras del nuevo mandatario “no fue tan suave” por las consecuencias para su nación.
Al participar vía remota desde La Paz en la inauguración del séptimo Encuentro del Grupo de Puebla, el mandatario pidió el apoyo de esa instancia para que durante los trabajos que se desarrollarán entre hoy y mañana en la Ciudad de México se revise esta situación de riesgo.
“Estamos ante la reagrupación de la derecha y de intentos, a través de los comités cívicos, de reditar las jornadas de 2019 en el país. Se han conjuntando intereses de todo género de la derecha, y a la cabeza de esos comités (hay) asambleístas nacionales y departamentales haciendo lo que ocurrió hace dos años: tratando primero de desestabilizar al gobierno democráticamente elegido y planteando propuestas que van desde discutir un federalismo, un nuevo pacto fiscal y otro tipo de planteamientos que sólo tienen el objeto de desgastar y desestabilizar. Y si se dieran las condiciones, reditar lo que ocurrió en 2019”, advirtió.
En noviembre de 2019, luego de ser elegido para un cuarto mandato, Morales renunció al cargo, a causa de la intervención de instancias internacionales y gobiernos extranjeros. Se inició así el gobierno de facto encabezado por Jeanine Áñez. Ante el riesgo para el líder boliviano y sus colaboradores, México les otorgó asilo político. Un año después, en las elecciones de octubre, el MAS triunfó con Arce como abanderado presidencial, con 55.1 por ciento de los votos, y asumió la presidencia en noviembre de 2020.
En lo económico, Bolivia pasará de una caída de 11 por ciento el año pasado, a un crecimiento de 6 puntos porcentuales al cierre de 2021.