Madrid. La muerte de Almudena Grandes generó diversos actos de homenaje públicos y civiles y reconocimientos. El gobierno español, presidido por el socialista Pedro Sánchez, le concedió ayer la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y, en Madrid, su ciudad y escenario de muchas de sus novelas, se aprobó que una de las calles lleve su nombre. Sin duda, el mejor homenaje a la novelista es el de sus lectores, que en menos de dos días han agotado los ejemplares de sus títulos en las librerías y su editorial, Tusquets, informó que tiene numerosas peticiones a raíz de su fallecimiento.
La conmoción también embargó al gobierno español, integrado por una coalición de izquierda del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Unidas Podemos (UP). La escritora siempre se declaró de izquierda, comunista, libertaria y defensora de la clase obrera, una condición que ella misma enarbolaba con orgullo.
El gobierno de Pedro Sánchez decidió reaccionar con la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, que concede el Ministerio de Cultura en reconocimiento a las trayectorias destacadas en el campo de la creación artística o cultural.
El pleno de la Asamblea del Ayuntamiento de Madrid votó por mayoría aplastante concederle una calle con su nombre. Todos los partidos políticos votaron a favor, con la excepción del ultraderechista Vox, que no sólo se opuso, sino que ha publicado varios mensajes ofensivos con su muerte y su memoria.
La editorial Tusquets informó que el próximo año se publicará una novela a la que se dedicó la es-critora en los últimos meses de vida. Todavía se sabe poco sobre ella, pero sí trascendió que está inspirada de alguna manera en la situación extraordinaria que ha vivido la humanidad desde 2020, con la pandemia, el confinamiento, las amenazas externas y la sensación de vulnerabilidad colectiva.