De acuerdo con el más reciente informe del Inegi, en octubre pasado la tasa de desocupación en el país afectó a 3.9 por ciento de la población económicamente activa (PEA), es decir, 0.8 puntos porcentuales menos que en el mismo mes de 2020, de tal forma que el citado indicador muy cerca está de ubicarse en la misma cota que al cierre de 2019.
De hecho, si se considera la estadística del Instituto Mexicano del Seguro Social, de julio de 2020 (cuando se registró el peor resultado de empleo durante la pandemia) y octubre de 2021 (periodo que abarca 16 meses) la creación de puestos de trabajo en el sector formal de la economía sumó cerca de un millón 272 mil plazas, un número mayor al reportado en todo el sexenio de Vicente Fox (un millón 203 mil) y representativo de 55 por ciento del que se generó en los seis años de estancia de Felipe Calderón en Los Pinos.
La información más reciente del Inegi (Indicadores de Ocupación y Empleo, octubre de 2021) revela que al cierre del décimo mes del presente año 58.7 millones de mexicanos de 15 años y más (equivalentes a una tasa de participación de 59.4 por ciento) son PEA; dicha cantidad se incrementó en 3.3 millones de personas en el periodo de referencia frente a la de igual lapso de 2020.
En cuanto a la población no económicamente activa (PNEA, dedicada al hogar, estudia, está jubilada o pensionada, tiene impedimentos personales o lleva a cabo otras actividades) se ubicó en 40 millones de personas (40.6 por ciento de la población de 15 años y más), 901 mil menos que en octubre de 2020. De esta categoría, 7.6 millones se declararon disponibles para trabajar, pero no llevaron a cabo acciones al respecto, por lo que se constituyen en el sector que eventualmente puede contribuir en el mercado; esta cifra significó una disminución de 1.3 millones de personas con relación a la de octubre del año pasado.
En lo relativo a la población económicamente activa desocupada, el Inegi detalla que al cierre del mes pasado 2 millones 318 mil mexicanos en edad y condición laboral permanecieron en dicha situación, de tal suerte que de octubre de 2020 a igual fecha de 2021 cerca de 288 mil personas abandonaron tan precaria condición y se sumaron activamente al mercado laboral.
La pandemia arrasó con el mercado laboral (el mexicano y el global), pero poco a poco da muestras de recuperación. Sin embargo, una de las más dañinas herencias de régimen neoliberal no se ha podido superar, dadas las arraigadas cuan leoninas prácticas de no pocos generadores de empleo (léase sector privado), a quienes seis gobiernos al hilo les permitieron –incluso ayudaron– precarizar aceleradamente los puestos de trabajo.
Muestra de ello es que en octubre de 2021, de los casi 56.4 millones de mexicanos ocupados apenas el 2 por ciento (un millón 243 mil, 182 mil menos que en el mismo mes de 2020) obtuvo un ingreso de cinco salarios mínimos o más. En cambio, 60 por ciento de esos mexicanos (33.8 millones) apenas recibieron hasta uno y dos salarios mínimos, como máximo. El crecimiento en este renglón fue de 3.3 millones de trabajadores en tan solo 12 meses.
Otro elemento a considerar es que 63 por ciento de los mexicanos ocupados labora en el sector terciario (comercio y servicios), mientras que apenas 12 por ciento lo hace en el primario (agricultura, ganadería, sector extractivo) y 25 por ciento en el secundario (industria).
Entonces, mientras no se eliminen las nefastas políticas neoliberales y las mañosas prácticas del sector privado a la hora de contratar personal, difícilmente se podrá mejorar el perfil del mercado laboral y la precarización cada vez será peor. Es loable, pero no suficiente, el sustancial incremento al salario mínimo que se registra desde el inicio de la presente administración. Pero de que falta, falta mucho.
Las rebanadas del pastel
Mientras la cotización del peso mexicano se recuperó 0.72 por ciento frente al dólar estadunidense, la pregunta es ¿quién fue el “insensato” que se animó a decir lo siguiente?: “la variante ómicron de Covid-19 no es causa para entrar en pánico; no consideramos medidas de confinamiento generalizado en el país; todos deben vacunarse”. ¿Andrés Manuel? No: Joe Biden. Y de pilón: “toda predicción sobre esa variante es prematura; es necesario esperar el pronunciamiento de los científicos” (Anthony Fauci, principal experto estadunidense en enfermedades infecciosas y asesor del presidente sobre Covid-19 del mandatario gringo).