Como buen conocedor de la historia neoleonesa, Abraham Nuncio consigna que “hoy” el Poder Ejecutivo estatal se encuentra en manos de los expertos determinados por el Consejo de Nuevo León. Un organismo aparentemente “ciudadano”, responsable de trazar las líneas estratégicas de gobierno. Es tan evidente su poder que la abanderada de Morena en las pasadas elecciones se “justificó” de no presentar un programa de gobierno propio porque “no” era necesario. Bastaba “con” el del Consejo de Nuevo León. La “calidad” del gobierno de Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, califica la pertinencia de ese “diseño” estratégico que culminó en un periodo improvisado, corrupto y fallido ( La Jornada, 23/9/21). Durante ese gobierno, Nuevo León concentró el mayor número de empresas “factureras” en el norte del país ( Reforma, 27/9/21).
En este cuadro, negro futuro parece aguardarle al sector salud bajo la administración entrante del candidato triunfador de Movimiento Ciudadano Samuel García, quien comunica que “tenemos que ser ultra creativos” ante los recursos presupuestales limitados, es preciso “innovar” vía las asociaciones público privadas (APP), el financiamiento extranjero a tasas muy “bajas” y “no” depender de los recursos de la Federación. García contempla “mejorar” los hospitales y brindar servicios dignos “subrogando” a la iniciativa privada para disponer así de “más” recursos ( El Economista, 17/9/21). ¡Vaya ultracreatividad!
El Bronco firmó un convenio con el Insabi, sin adherirse. Por tanto, García deberá asumir la responsabilidad de administrar y operar los servicios e infraestructura en salud. Según el Inegi, de los casi 5.8 millones de habitantes, 50 por ciento está cubierta por el IMSS, 35 por ciento por Insabi, 9 por ciento por el Issste o Isssteleón y el resto por alguna institución privada.
García ofreció, además, “un compromiso” para brindar mejores prestaciones al personal de salud y enfrentar el delicado tema del embarazo adolescente con un “nuevo” eje de “igualdad” para evitarlo porque “tres de cada 10 bebés son hijos de neoleonesas muy jóvenes”. Su “innovadora” agenda deberá además enfrentar los saldos del afortunadamente ya extinto Seguro Popular. Según Coparmex, en 2020 las familias neoleonesas gastaban en salud 40 por ciento más que el promedio nacional: mil 176 pesos trimestrales ( El Economista, 7/5/20). Pero, en vez de atacar de raíz este ominoso gasto, García quiere subrogar servicios que, como está comprobado, son mucho más caros para el contribuyente o usuario sin que, además, mejoren la atención efectiva.
Para llevar adelante su “innovadora” administración, García –el gobernador más joven en la historia de la entidad, supuestamente votado por una mayoría de jóvenes– ha puesto a su alma mater, el Tec de Monterrey –de donde es egresado y también doctorado– al frente de la secretaria de Salud local. Y ¿con quién?, con Alma Rosa Marroquín Escamilla, pediatra egresada de la Universidad Autónoma de Nuevo León y antes, justamente, directora médica del Instituto TecSalud.
Con todo, en su primer discurso como gobernador, García aclaró que buscará “llevar” una buena relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador porque los “pleitos” de la Alianza Federalista no funcionaron. Y ratificó a su Consejo “privado” –fuera del gobierno– que integran: Mauricio Dohener, Fernando Elizondo, Salomón Chertorivski, Pedro Torres, Francisco Garza Egloff, Francisco Garza Zambrano, David Noel y Lourdes Dieck ( Reforma, 4/10/21).
Tendrán trabajo y veremos pronto qué tan “ultracreativos” son, pues la deuda heredada tiene su peso. En enero 2021, todavía bajo la administración de El Bronco, la Secretaría de Finanzas y Tesorería General comunicó que contrataría deuda pública por casi 3 mil millones de pesos para “fortalecer” la infraestructura hospitalaria y de movilidad. El financiamiento, contratado a 20 años, se pagará con ingresos por el impuesto sobre nóminas y transferencias federales ( Milenio, 14/01/21).
La secretaria Marroquín tendrá también que enfrentar, de inmediato, el gran desafío estatal de la asociación tuberculosis/diabetes –previo a la pandemia– y que ubica en Nuevo León –junto con Veracruz y Tamaulipas– con el mayor número de casos a escala nacional. Más el ingente tema de la guarderías, necesarias para que las mujeres neoloenesas puedan trabajar.
Y luego llegó la oferta Samuel García de las mañaneras neoleonesas. Como gusta decir Mariana Rodríguez, la joven esposa del gobernador: en materia de salud, la secretaria Marroquín y su Tec-Salud están claramente ante ese curioso fenómeno de que lo que ella misma acuñó como lo que te “choca te checa”. ¿A ver cómo lo atienden y qué resultados brindan?
* Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco