Los medios comunitarios con perspectiva feminista se involucran con diversas luchas que no abordan los medios empresariales ni comerciales, y han desarrollado una forma diferente de hacer comunicación, precisaron Maru Chávez, directora de la emisora comunitaria feminista Violeta Radio y Clara Meyra Segura, de Proyectos México de Rosa Luxemburg Stiftung.
En el encuentro virtual “Comunicación y periodismo feministas”, en el contexto de los 16 días de activismo tras el 25N, Maru Chávez destacó que además de reivindicar las exigencias de las mujeres y pugnar por el respeto a sus derechos, dicho medio comunitario, el cual nació después de la democratización del espectro radioeléctrico, aborda las luchas de los pueblos originarios, “de nuestras ancestras, temas medioambientales, de salud, las historias de rebeldía y las diversas resistencias de las mujeres”.
Destacó la existencia de reporteras comunitarias, “la manera desenfadada de cómo hacemos comunicación, el proceso de capacitación que tuvieron antes de comenzar a transmitir (2016) en Violeta Radio en materia de feminismo y producción radiofónica.
“Con el apoyo de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias, se libró una lucha de por lo menos tres décadas para cambiar la legislación y que las comunidades pudiéramos acceder al espectro radioeléctrico”. Sin embargo, lamentó que éste aún se encuentre acaparado por los grandes empresarios de los medios de comunicación de radio y televisión.
Contó que la idea de crear una emisora feminista “se gestó en 1991 con un programa de radio en un medio público, después se trasladó a un proyecto específico de posicionar los derechos de las mujeres en las radios comunitarias existentes. En 2016, cuando existían las condiciones para manejar una frecuencia, desde Salud Integral para la Mujer (Sipam) solicitamos una frecuencia e invitamos a otras organizaciones feministas, así nació Violeta Radio. Nuestro fin es posicionar las voces de las mujeres de la Ciudad de México, principalmente, y también de otras partes del país”.
Raquel Ramírez Salgado habló de su proyecto Escuela Feminista de Comunicación, que surgió como parte de una tesis y acotó que el derecho a la educación para las mujeres no está garantizado en muchas regiones del mundo, incluso si se tiene acceso hay que sortear diversos obstáculos y algunos llegan a percibir esto como un privilegio.
“La brutalidad del sistema es tal que más bien los derechos parecieran privilegios. Estaríamos poniéndole las cosas más fáciles al sistema en la medida que hablamos de privilegios y no de derechos.”
Ramírez también conminó a tejer alianzas “para colarnos por las fisuras del patriarcado para poder transformar la educación”.