Ciudad de México. El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Filippo Grandi, aseguró que México enfrenta una “creciente presión” con la llegada por sus dos fronteras de miles de migrantes con diferentes necesidades de protección, por lo que urgió al Estado mexicano a encontrar alternativas migratorias que vayan más allá del asilo e incrementar el presupuesto de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
En un balance después de su visita oficial de tres días al país, el funcionario dijo que pudo testificar el creciente número de personas en éxodo hacia México, qué está “en medio y bajo una doble presión”, pues por un lado miles huyen de la violencia, abusos y amenazas de las pandillas criminales que los mantenían bajo acecho en sus países, e ingresan por el sur, y otras miles son enviadas desde el norte producto de las políticas migratorias de Estados Unidos.
Tras conversar en esta gira –que incluyó visitas a la Ciudad de México, Guadalajara y Tijuana– con muchos migrantes, Grandi observó que a México están llegando personas con diferentes necesidades de protección, muchas de nacionalidad haitiana, y su única opción actualmente es el asilo, sin más alternativas de protección migratoria ni de integración.
Es tal esta crisis, que las solicitudes de asilo en México han sobrepasado las 116 mil en lo que va de 2021, un récord histórico, pues la cifra es 46 por ciento superior a las que se presentaron durante todo 2020, el que había sido el año con mayor registro. Por ello, destacó la urgencia de que el gobierno mexicano incremente el presupuesto de la Comar, acorde con las necesidades y de fortalecer el sistema de asilo.
“México se encuentra hoy bajo una creciente presión con la llegada continua de personas con necesidades distintas y cada vez más complejas a sus dos fronteras. No puede haber una sola respuesta, las soluciones tienen que ser integrales, inclusivas con un enfoque regional. Es crucial reforzar el sistema de asilo, asegurar alternativas migratorias y una integración efectiva”, enfatizó el alto comisionado.
Refrendó el compromiso de la agencia a su cargo para continuar fortaleciendo el sistema de asilo y buscar soluciones a los retos de la movilidad humana en la región; además de apoyar el desarrollo de un marco normativo y políticas de prevención y protección a las víctimas de desplazamiento interno.
Grandi subrayó que el programa de reubicación del sur al norte del país y de integración local emprendido por Acnur, que ha beneficiado hasta ahora a más de 14 mil migrantes que han obtenido la condición de refugiados, y en cooperación y coordinación con otras agencias de Naciones Unidas, se podría ampliar y dirigirse a personas con una regularización migratoria alternativa al asilo.
Este programa “se está implementado con éxito en 11 ciudades del centro y norte de México, donde la oferta laboral y de vivienda, así como los sistemas de educación y salud, permiten a las personas refugiadas empezar a reconstruir sus vidas”, detalló Acnur.
En su visita al país, se entrevistó con migrantes para conocer sus testimonios, y también con autoridades de distintos órdenes de gobierno.