Con una serie de manifestaciones, reclamos de justicia y propuestas para poner un alto a la violencia de género, este 25 de noviembre cientos de personas de por lo menos 14 ciudades conmemoraron el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
Las protestas se realizaron en Chihuahua capital, Ciudad Juárez, Mexicali, Hermosillo, Pachuca, Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal, Oaxaca, Cancún, Mérida, Tepic, Querétaro, Cuernavaca y Ciudad Nezahualcóyotl.
Madres con hijas asesinadas en Chihuahua exigieron a la gobernadora panista María Eugenia Campos castigo para los feminicidas y encontrar a las aún desaparecidas.
También 300 integrantes de colectivos feministas se congregaron junto a la cruz de clavos frente a palacio de Gobierno en la ciudad de Chihuahua para marchar por el primer cuadro capitalino.
La mandataria de Baja California, la morenista Marina del Pilar Ávila Olmeda, anunció la instalación de Puntos Naranja en establecimientos comerciales, para proteger a las mujeres y las niñas que sufran algún tipo de violencia de género.
En Sonora, colectivos marcharon por las principales calles de Hermosillo en repudio a la violencia contra mujeres, adolescentes y niñas. El grito de “Ni una más, ni una asesinada más”, quebraba sus voces.
También en Oaxaca capital, organizaciones feministas develaron ayer la Monumenta contra el Feminicidio y la Violencia Feminicida “como una forma de visibilizar que en Oaxaca nos están matando”, señaló una activista.
En Cancún, Quintana Roo, más de cien mujeres conmemoraron el Día Naranja con un bloqueo en la zona hotelera por más de 40 minutos, para demandar a las autoridades que detengan los feminicidios.
En Mérida, Yucatán, el colectivo Chuunt'aan exigió reformar la Constitución local, pues se han soslayado sus usos y costumbres, condenándolas a vivir en un ambiente de agresión contra las mujeres de origen maya, denunció.
En Chiapas, diferentes organizaciones se manifestaron en San Cristóbal y Tuxtla Gutiérrez para exigir que cesen la violencia y los feminicidios, así como para pronunciarse en contra de la instalación de cuarteles de la Guardia Nacional.
En Morelos, activistas protestaron en Cuernavaca para exigir que acaben las agresiones y los asesinatos contra este sector. Señalaron que la entidad se ubica entre los primeros lugares de violencia de género.
Las protestas se repitieron en Tepic, Nayarit; Pachuca, Hidalgo y en la capital de San Luis Potosí, en donde los ánimos se desbordaron y las manifestantes –algunas encapuchadas– rompieron vidrios de oficinas gubernamentales.
El gobierno municipal potosino ofreció disculpas públicas a mujeres agraviadas en la administración pasada.