Nueva York., Organizaciones sociales, de salud, sindicatos, religiosos y legisladores entregaron más de 3 millones de peticiones al gobierno de Joe Biden instándolo a que cumpla con su compromiso a favor de una suspensión temporaria de las reglas internacionales de propiedad intelectual que siguen limitando el acceso a vacunas anti-Covid y otros tratamientos alrededor del mundo.
Las organizaciones y líderes apremian a Biden a demostrar el liderazgo de Estados Unidos ante el mundo al promover una suspensión temporal en la próxima reunión ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC), el 30 de noviembre.
En mayo se elogió al gobierno de Biden cuando se sumó a unos 120 países –la mayoría dentro de la OMC–, pero han transcurrido seis meses, y un año desde que Sudáfrica e India impulsaron primero la propuesta. Ante la falta de acción de Estados Unidos, la Unión Europea y Reino Unido obstaculizaron la iniciativa.
Las demandas de diversas organizaciones en Estados Unidos son parte del apoyo nacional para cancelar temporalmente las reglas de propiedad intelectual, con una mayoría de los legisladores demócratas, 400 organizaciones civiles, académicos y figuras públicas, entre otros. A la vez, todos forman parte de un llamado mundial a favor de la suspensión respaldada por 250 organizaciones internacionales (como Médicos sin Fronteras, Amnistía Internacional, Oxfam, Avaaz, Greenpeace), ex mandatarios, premios Nobel y varias confederaciones sindicales [https://bit.ly/30TSznq].
Lori Wallach, directora de Global Trade Watch en la organización Public Citizen –una de las principales impulsoras de este esfuerzo nacional e internacional–, declaró que “la cosa más importante que la OMC puede hacer para poner fin a la pandemia es remover las barreras de patentes para salvar vidas”. Tal suspensión sólo se logrará si “el gobierno de Biden aplica una máxima presión diplomática y política”.
Abby Maxman, presidenta de Oxfam America, dijo que “las farmacéuticas han demostrado que no podemos contar con ellas para ofrecer acceso a vacunas para todos. Sólo la acción concertada por gobiernos para obligarlas a compartir su tecnología, conocimiento y propiedad intelectual lo logrará”.