Rogelio Funes Mori, atacante del Monterrey, remarcó que los Rayados van por otro gran objetivo. “El primero era la Concachampions, donde logramos salir campeones; después era entrar a la liguilla, y ahora de los ocho equipos cualquiera pue-de salir monarca”. Dijo que respetan al Atlas, al que recibirán la noche de hoy en la ida de cuartos de final en el llamado Gigante de Acero, “pero vamos a salir a ganar”.
Horas antes, el técnico de los rojinegros, Diego Cocca, endilgó la etiqueta de abocados al triunfo a los Rayados, a pesar de que el Atlas quedó en segundo sitio de la tabla general, y Funes Mori aceptó: “Sabemos que somos un equi-po competitivo, Atlas hizo un torneo muy bueno, gran futbol y muchos puntos, bueno (aun así), nos ponemos o nos ponen como favoritos”, dijo en rueda de prensa.
Adelantó que los regiomontanos buscarán aprovechar estar en casa, “nuestra cancha y el apoyo de la gente. Vamos a salir por la victoria, respetamos al rival, sin embargo, ya estamos en la fiesta grande y nos exigimos a nosotros mismos hacer las cosas bien, seguir mejorando, porque hemos ido de menos a más. Cada uno de los muchachos nos vamos sintiendo mejor”, observó.
A los Rayados les costó progresar “por tema de viajes, bajas y llamados a selección. Hicimos traslados largos, regresábamos, otros se recuperaban de lesiones, y en realidad casi no habíamos tenido entrenamientos juntos, pero sabemos la calidad que hay, ahora todos quieren sumar y hacer las cosas correctamente para el bien del equipo.
“Contra Cruz Azul fue difícil, pero pudimos sacar el resultado porque hay calidad, así que debemos estar tranquilos, concentrados”, abundó. Descartó que el Atlas, sin partidos oficiales desde hace unos 20 días, esté fuera de ritmo, “sin duda ha estado entrenando, ha hecho un gran torneo, por algo terminó entre los cuatro mejores, pero –insistió–, saldremos a ganar”.
Funes Mori no quiso saber de su récord de anotaciones ni de que en el presente certamen desbancó al chileno Humberto Chupete Suazo como máximo artillero del equipo. “Sinceramente no sigo mucho las estadísticas, sólo quiero hacer lo mejor para el club y por mis compañeros. Obviamente quiero hacer goles y siempre estoy exigiéndome”.
En Guadalajara, los Zorros fueron despedidos con aplausos por los trabajadores del equipo que les hicieron valla rumbo al autobús que abordaron hacia el aeropuerto, donde un vuelo charter los trasladó a la capital neolonesa.