Ciudad de México. Ante “la grave situación de seguridad vial en la CDMX, es necesario expandir y fortalecer el programa de fotocívicas, la medida más urgente es aumentar la cantidad de estos dispositivos en la ciudad e implementar medidas para identificar más personas infractoras, en particular vehículos emplacados fuera de la CDMX y motociclistas, además, se necesitan más datos para evaluar si una reforma al esquema de puntos y sanciones podría mejorar el impacto del programa”, concluye, un estudio elaborado por la oficina del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP) en México.
“Entre enero y marzo de 2021, fallecieron un 15.3 por ciento más personas en siniestros de tránsito que en el mismo periodo de 2019 (según datos de la Semovi, 2021), esta cifra es particularmente preocupante si se tiene en cuenta la reducción del tránsito vehicular a raíz de la contingencia sanitaria por Covid-19, así como la reducción observada de siniestros de tránsito durante el mismo periodo”, revela el estudio del ITDP elaborado con el apoyo de la Fundación de la Federación Internacional del Automóvil (FIAF) y del el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Aún hace falta mayor investigación al respecto, ya que varios factores pueden explicar este fenómeno, incluyendo el aumento en la velocidad de circulación de vehículos motorizados o el aumento en la flota de ciertos tipos de vehículos, agrega el análisis.
“Todo parece indicar que durante el 2020 y el 2021 hubo una reducción en el número de siniestros de tránsito, sin embrago los ocurridos durante este periodo han sido más graves. Un aspecto importante a destacar en esta tendencia es que los siniestros con víctimas mortales se han concentrado en las vías más rápidas”, agrega.
De acuerdo con el estudio el 82.5 por ciento de las muertes por siniestros de tránsito en la CDMX se concentran en la red vial primaria, que representa únicamente el 8 por ciento de la red vial. Cabe destacar que las vías que concentran el mayor número de muertes viales son aquellas en las que se circula a mayor velocidad.
“En efecto, las vías de acceso controlado, en las que se permite circular a 80 kilómetros por hora, concentran el 31.7 por ciento de las muertes viales, aunque solo representan el 1.7 por ciento de la red vial”, indica.
A las vidas perdidas por los siniestros de tránsito, se suman además altos costos sociales y económicos asociados a las lesiones, discapacidades permanentes y daños materiales causados. Se estima que en México, estas externalidades negativas tienen un costo que ronda entre el 1.3 por ciento y el 2.1% del PIB
Ante esta situación, es indispensable reducir la velocidad de circulación de los vehículos motorizados para reducir el número de muertes y lesiones por siniestros de tránsito en la CDMX. 82.5 por ciento de las muertes viales ocurren en las vías de mayor velocidad.
Añade que un perfil que levanta mayores preocupaciones es el de las personas en motocicleta, indica que frecuentemente estos no pueden ser sancionados, “porque la placa no resulta legible en la foto tomada por el dispositivo de Fotocívicas, portan placas foráneas o un permiso temporal para circular sin placa”.