El año que entra, en materia económica y de financiamiento “aún no se pueden echar las campanas al vuelo”, puesto que la pandemia en México no concluye y hay diversos sectores que todavía no se recuperan, advirtió Enrique Bojórquez, presidente de la Asociación Mexicana de Entidades Financieras Especializadas (AMFE).
En una entrevista, el directivo precisó que prevalece la duda de cuál será el comportamiento de la pandemia durante el último mes del año, y de ello dependerá cómo se mueva la actividad económica a principios de 2022.
“El próximo año todo dependerá de cómo nos trate la pandemia en este invierno que comienza en diciembre. Si la tendencia fuera la del segundo semestre de este año será un 2022 bueno, pero todavía no es tiempo de echar las campanas al vuelo porque la pandemia nos puede dar un coletazo”, apuntó.
Desde la AMFE, el principal “temor” para las actividades económicas y de financiamiento es el comienzo de la temporada de invierno en el país y el posible aumento de casos de Covid-19. “Le tenemos particularmente temor a la entrada del invierno por lo que vemos en Europa y otras partes del mundo. Mientras la pandemia no esté bajo control, como ahora, no vamos a tener un ritmo como el de antes de la pandemia”, comentó.
En la perspectiva de la AMFE, donde las instituciones financieras dan crédito principalmente a las actividades primarias de la economía, el balance del año es un poco positivo, pues la economía se recupera, pero no por completo. La demanda de crédito, detalló, está latente en las empresas y las familias; sin embargo “existe cierta prudencia”, dado que hay giros o actividades económicas a los que la pandemia les ha afectado. “Se está haciendo una especie de dos vistas: hay criterios más estrictos para dar el crédito, antes la economía te iba llevando, pero cuando se detiene y hay sectores paralizados tenemos como instituciones, que velar por el crédito responsable”.