A casi un año y medio de haberse registrado para obtener la Pensión de Bienestar para las Personas Adultas Mayores, la señora María del Carmen Contreras Barrera no ha logrado obtener ese apoyo, además de que ha recibido un trato descortés en las sedes a las que ha acudido e incluso fue advertida de que “si sigue preguntando, menos la van a atender”.
En entrevista, la mujer –quien trabaja como empacadora voluntaria en un supermercado– explicó que la primera vez que trató de hacer el trámite para registrarse en este programa social fue rechazada por una representante de la Secretaría de Bienestar (SB) por no tener 68 años cumplidos, al tiempo que sí aceptó a algunas de sus vecinas que tampoco cumplían ese requisito.
A mediados de 2020, luego de que se amplió el rango de edad de los beneficiarios a 65 años, Contreras acudió a un módulo de inscripción y logró completar el trámite, “pero pasaba el tiempo, iba a ver qué había pasado y sólo me decían ‘que después, a lo mejor, ya casi’”, pero sin que recibiera la tarjeta que le daría acceso al apoyo de 3 mil 100 pesos bimestrales.
Al acudir a distintas sedes de la dependencia en el norte de la Ciudad de México, dijo que recibió como explicación del retraso que había elecciones u otro proceso político que impedía a la institución entregarle el plástico. Esto, sumado a la falta de respuestas sobre su petición, indicó, ella y otras personas de la tercera edad se enfrentaron a un trato irrespetuoso. “Quienes atienden son muy groseros y no tienen ningún respeto por los adultos mayores. No nos tienen ninguna consideración y sólo nos mandan de Herodes a Pilatos”.
En la sede del antiguo cine Futurama, narró, “no me dejaban pasar, me llamaron ‘necia’ y ‘tonta’, porque me dijeron que ahí no me tocaba, y me mandaron al deportivo Carmen Serdán”, donde tampoco obtuvo respuesta a su solicitud.
En uno de los tantos sitios donde ha acudido, señaló, le advirtieron que si seguía insistiendo en su petición, “menos la van a atender”, porque supuestamente el procedimiento se reiniciaba con cada consulta.
“Tengo una pensión de viudez, pero es muy baja, y la ayuda de Bienestar sería para complementar mis gastos. Ni siquiera es para comprar un mueble, sino para mi alimentación y comprarme al menos unos zapatos”, detalló.