Caracas. Los venezolanos elegían el domingo a los mandatarios estatales y municipales del país sudamericano, en unos comicios donde no está en juego la presidencia de Nicolás Maduro, pero para muchos se someterá a prueba el sistema electoral de Venezuela —tras la inhabilitación de partidos y de algunos de los candidatos opositores más populares— así como verificar la pulcritud del proceso tras años de denuncias de abusos.
Desde temprano comenzaron a llegar a cuentagotas los electores — portando tapabocas por la pandemia del Covid-19— a los centros de votación en Caracas. Muchos de esos electores madrugaron atendieron el llamado de los oficialistas, quienes horas antes recorrían las calles de la ciudad llamando a votar al ritmo del “toque de diana”, una costumbre impuesta por el ahora fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013).
“Suena la diana de la victoria, los cohetones (fuegos artificiales), palpita fuerte el corazón. Vamos a votar venezolanas y venezolanos, unidos por amor a la Patria, en Paz y Armonía”, dijo Maduro el domingo a través de Twitter.
Los comicios estatales y municipales, que suelen realizarse por separado y la abstención ha sido alta en el pasado. En el enrarecido clima electoral venezolano el proceso podría considerase exitoso si supera 50%.
En recorridos por la capital venezolana, luego de casi seis horas de comenzado el proceso de votación, se evidenciaba escasa afluencia de electores, pese a la constante arenga de las distintas organizaciones partidistas a votar.
El oficialismo, que controla casi todas las instituciones (alcaldías, gobernaciones y la Asamblea Nacional), es el favorito para adjudicarse la mayoría de los cargos. Entre más de 70.200 candidatos, se elegirán 3.082 cargos, de ellos 23 gobernadores, 335 alcaldes, 253 legisladores de consejos estatales y 2.471 concejales municipales. En su mejor momento, la oposición conquistó seis gobernaciones y 76 alcaldías en 2008 y 2013, respectivamente.
Las elecciones son monitoreadas por cientos de observadores, entre los que destacan los miembros de una misión de la Unión Europea -entre otros organismos independientes- en atención de una añeja exigencia de los adversarios del gobierno socialista.
La misión europea divulgará un informe preliminar el miércoles y el próximo año presentará sus conclusiones y dará recomendaciones para futuros comicios. Por años, los comicios fueron “acompañados” por veedores en su mayoría miembros de organismos electorales multilaterales y regionales cercanos al Ejecutivo venezolano.
Los comicios también marcan el retorno a la senda electoral de los principales partidos opositores, que desde 2017 habían boicoteado los procesos electorales argumentando que no existían condiciones suficientes para garantizar que las elecciones fuesen justas y transparentes.
“Estamos felices realmente de consolidar el proceso democrático, la participación del pueblo venezolano, que aquellos que habían tomado otro rumbo se vean también aquí reflejados”, en alusión a la participación en los comicios de algunos de los más enconados opositores de Maduro en los comicios, dijo la vicepresidenta Delcy Rodríguez a la prensa tras emitir su voto.
El proceso de votación se desarrollará entre las 6 de la mañana (10:00 GMT) y las 6 de la tarde (22:00 GMT), aunque se podría extender más allá de ese horario en cualquiera de los 14.202 centros en los que existan electores por sufragar. Las autoridades electorales informaron que 76% de las mesas de votación se encontraban abiertas antes de las 8 de la mañana.
El primer boletín de resultados se esperaba tarde en la noche. Las leyes venezolanas prohíben la difusión de encuestas a boca de urna antes del primer boletín oficial.