Dos mujeres fueron asesinadas en distintos ataques la madrugada de este sábado en el municipio de Nezahualcóyotl, estado de México, informaron autoridades.

Dentro del bar Pacha, ubicado en la avenida Texcoco, colonia Metropolitana Primera Sección, sujetos armados dispararon contra los clientes; una mujer murió a causa de las heridas de bala y tres personas resultaron heridas.

Los lesionados, identificados como Alexis N, de 18 años; Saúl N, de 27; Jonathan N, de 18, y una cuarta víctima que, por su gravedad, no fue posible conocer su identidad, fueron trasladados a hospitales.

Agentes hallaron al menos 10 balas calibre 9 milímetros dentro del bar. La policía estatal indicó que la carpeta de investigación fue remitida al área de feminicidios de la Fiscalía General de Justicia del estado de México (FGJEM).

Asimismo, en la calle Tonatico de la colonia Atlacomulco, fue hallado el cuerpo de otra mujer, que fue atacada con arma de fuego.

Mientras, en Zumpango, Alan Uriel Sánchez Cruz fue condenado a 51 años y tres meses de prisión, por el feminicidio de su pareja sentimental, ocurrido en 2017 en este municipio mexiquense. En Soyaniquilpan, detuvieron a Manuel N, de 43 años, por su probable participación en el abuso sexual contra una menor de 16 años de edad.

Recuerdan a víctimas de transfobia en Jalisco

En Jalisco, en conmemoración del Día Internacional de la Memoria Trans, manifestantes señalaron que “la transfobia proviene no sólo de hombres, sino también de las mujeres”, y denunciaron que en un espacio de trueque y venta conocido como La Mercadita, exclusivo para féminas, que se ubica en el parque Revolución, de Guadalajara, dos mujeres trans fueron expulsadas por feministas, porque “tienen pene”.

Al respecto, en un cartel que portaba una mujer transexual se leía: “Mis genitales no definen mi identidad de género”. En la concentración participaron decenas de personas para recordar a las víctimas de transfobia, en el parque Revolución.

Ese mensaje, como otros similares, mostraron el sentido de la manifestación en un estado como Jalisco, donde dos mujeres transexuales, Karla García Duarte y Kenia Duarte Pérez, siguen desaparecidas desde el 18 de septiembre de 2020, y en lo que va de 2021 tres han sido asesinadas.

Esa proclama también formó parte de las protestas, pues tampoco han detenido al hombre que arrojó ácido en cuerpo y cara a Zoé, el 19 de octubre. Por su parte, Desiré, una de las expulsadas hace una semana de La Mercadita, dijo que todo tipo de mujer (indígena, trans, de raza negra, con capacidades diferentes), tiene los mismos derechos y no sólo “un grupo de mujeres radicales que se sienten con el poder de decir esto sí y esto no es mujer”.

“Como sociedad debemos entender que las trans son mujeres, que la lucha no es de unas contra otras sino contra el patriarcado. Y la transfobia debe ser erradicada”, leyeron en un manifiesto.

La protesta fue lúdica, multicolor, vistosa, con performances, bailes y risas. A las decenas de manifestantes se unieron ciudadanos atraídos por lo que parecía un pequeño carnaval, pero en el fondo nunca se perdió la esencia de la protesta.

En el país, el promedio de vida de una mujer trans es de 35 años. Al respecto, la organización Letra S reportó que “entre 2013 y 2018, hubo 473 homicidios de personas LGBT+ en México, de los cuales 261 eran mujeres trans”.