Los tres aspirantes a ocupar el cargo vacante en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Bernardo Bátiz Vázquez, Loreta Ortiz Ahlf y Verónica de Gyvés Zárate, reivindicaron ayer ante senadores su autonomía e independencia frente al Ejecutivo federal y se comprometieron a combatir la corrupción dentro del Poder Judicial de la Federación (PJF).
Al comparecer por separado ante la Comisión de Justicia del Senado, por casi siete horas, tanto Bátiz como Ortiz Ahlf fueron objeto de cuestionamientos reiterados, sobre todo por senadores del PAN, en torno a su cercanía con el presidente López Obrador y ambos resaltaron que su amplia trayectoria jurídica demuestra su imparcialidad y apego a la justicia y la ley.
Ortiz Ahlf resaltó que sería “histórico” que hubiera cuatro mujeres en la Suprema Corte y que se eligiera “a una jurista plenamente comprometida con la protección y garantía de los derechos humanos”.
En su turno y en respuesta a una crítica sobre su inclusión en la terna, Bátiz respondió: “es un honor” haber sido invitado a participar en ese proceso por quien considera “el mejor presidente que ha tenido México en los últimos 60 o 70 años”, aunque está consciente, expuso, de que se requiere la equidad de género en un tribunal donde, de 11 ministros, sólo tres son mujeres.
Los panistas Damián Zepeda y Xóchitl Gálvez insistieron en preguntar a los tres aspirantes cómo van a garantizar que ya como ministros sus sentencias no favorezcan indebidamente al Presidente.
Bátiz resaltó que cuando fue procurador de Justicia en la administración del entonces jefe de gobierno de la Ciudad de México y actual Ejecutivo federal nunca le formuló recomendación alguna.
“No soy una persona que simplemente obedezca lo que otros deciden, si fuera ministro de la Corte yo actuaría ejerciendo plenamente mi libertad”. De lo contrario, agregó, “preferiría renunciar o separarme del cargo”, comentó el ex procurador capitalino y actual integrante del Consejo de la Judicatura Federal.
En su turno, Loreta Ortiz expuso que siempre ha actuado bajo el principio de que un juzgador debe dejar aparte su ideología política, religión o cualquier otro tema personal al impartir justicia. Recalcó que, como integrante de la Comisión de Disciplina del Consejo de la Judicatura jamás habló a ningún juzgador para pedir alguna resolución, y resaltó que examinó el caso del juez Juan Pablo Gómez Fierro, quien otorgó infinidad de amparos contra la ley eléctrica de López Obrador y no hubo sanción alguna, pues no se hallaron irregularidades.
Por su parte, Verónica de Gyvés, también integrante del Consejo de la Judicatura, quien se mostró nerviosa durante la comparecencia, respondió que no se le puede considerar muy cercana al Ejecutivo y tuvo “la fortuna” de que viera su trayectoria y la propusiera. Además, expuso, su experiencia de 26 años como juzgadora da cuenta de su independencia.
Ortiz Ahlf, la última en comparecer, se comprometió a llevar adelante la reciente reforma judicial, lo que implica, dijo, redoblar los esfuerzos en el combate a la corrupción, al tráfico de influencias y al nepotismo. Esto, recalcó, “como un factor determinante para recuperar la confianza de la sociedad” en jueces y magistrados.
Al respecto, Bátiz resaltó que además de velar por el cumplimiento de la Constitución, otro de los principios que regirán su conducta es la defensa de la soberanía nacional y el combate a la corrupción. Sostuvo que se ha emprendido esa batalla a fin de mejorar las estructuras y cerrar los vicios que permiten a jueces y magistrados imponer a familiares e incondicionales en los cargos.
De Gyvés reconoció que los casos de acoso sexual se han elevado en el Poder Judicial.
El panista Damián Zepeda, que ayer actuó como fiscal, les exigió definiciones sobre el aborto. Bátiz respondió que está en contra, pero a favor de la despenalización; Ortiz dijo que es un tema personal, sin embargo, apoya plenamente que no se criminalice más.
Respecto de la controversia en torno a la pregunta que la SCJN debe aprobar para la consulta sobre la revocación de mandato, Batiz consideró que debería ser: “¿Estás de acuerdo en le revocación de este gobierno?” Y Ortiz Ahlf salió al paso de las críticas por no haberse pronunciado en torno al transitorio de la reforma judicial que permitió ampliar el periodo y el de los integrantes del Consejo de la Judicatura. “Había una controversia constitucional” por resolver.
Bátiz y Ortiz respondieron con soltura tanto las preguntas de orden constitucional como las políticas.
La Comisión de Justicia, que preside el morenista Julio Menchaca, aprobó por 13 votos a favor y uno en contra el dictamen que declara elegibles a los tres candidatos. El martes pasará al pleno, donde comparecerán de nuevo y se elegirá al nuevo integrante de la Corte.