El Senado concluyó ayer la aprobación de las reformas a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, que prevé la eliminación total de los plásticos de un solo uso para 2025, exceptuando aquellos que no pueden ser sustituidos por otros materiales.
La reforma había quedado pendiente, pues en la sesión del jueves –cuando fue aprobada en lo general y estaba por concluir en lo particular– la oposición rompió el quórum porque Morena y sus aliados no cumplieron la inclusión de una reserva, con un transitorio para dejar a salvo a entidades como la Ciudad de México o Nuevo León, que tienen legislaciones más avanzadas.
Ayer el coordinador Ricardo Monreal logró destrabar el problema al proponer que la reforma se aprobara en sus términos, porque ya había sido votada, con el compromiso de presentar una nueva iniciativa con el transitorio en cuestión. El presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Raúl Bolaños Cacho Cué (PVEM), expuso en tribuna que el martes próximo llevará al pleno la iniciativa y propuso participar en la redacción de la misma.
El panista Víctor Fuentes insistió en que hubo presiones empresariales para que no se señalara en la reforma la salvedad de esperar hasta 2025 para la prohibición total del empleo de plásticos de un solo uso a entidades como Nuevo León, Sonora, estado de México, Nayarit, Baja California Sur y otros que están a la vanguardia y han avanzado más en ese tema.
La reforma plantea asimismo prohibir el uso, consumo, comercialización, distribución o ingreso en áreas naturales protegidas o insulares de plásticos de un solo uso.
Establece que todos los residuos generados por envases y empaques de plástico deben estar sujetos a un plan de manejo obligatorio, con metas progresivas, plazos de acopio, reciclaje y contenido mínimo de material reciclado y acciones de coordinación y preventivas.
También propone subclasificar los residuos en orgánicos, inorgánicos y reciclables, a fin de que los últimos sean integrados en procesos productivos que contribuyan a alargar su vida útil, evitando que lleguen a rellenos sanitarios y tiraderos.