Ciudad de México. El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó este viernes la extensión por dos años de una línea de crédito flexible (LCF) para México, aunque a petición de las autoridades nacionales la redujo de 61 mil millones a 50 mil millones de dólares, informó el organismo.

Es la novena ocasión en la que el organismo y el gobierno mexicano renuevan esta línea de crédito, que hasta ahora no ha sido utilizada, desde que fue contratada por vez primera en abril de 2009.

La LCF es una facilidad creada por el FMI para aquellos países que tienen finanzas estables y que se concede para que decidan utilizarla si enfrentan condiciones externas que puedan provocar dificultades.

A diferencia de los créditos tradicionales, la LCF no conlleva ningún tipo de compromiso de política pública por parte del gobierno que recibe la facilidad ni está sujeto a cumplir condición alguna para obtenerla.

“La economía mexicana está recuperándose de la recesión más profunda que ha sufrido en décadas, impulsada por el sólido crecimiento en Estados Unidos y el aumento de las tasas de vacunación. Las autoridades han mantenido con éxito la estabilidad externa, financiera y fiscal, a pesar de los desafíos relacionados con la pandemia. Las políticas macroeconómicas y los marcos institucionales de políticas siguen siendo muy sólidos, incluidos un régimen de tipo de cambio flexible, un marco creíble de metas de inflación, una ley de responsabilidad fiscal y un sector financiero bien regulado”, expuso el FMI al dar a conocer la extensión de la LCF.

Expuso que, sin embargo, la economía de México sigue estando muy expuesta a riesgos externos, incluyendo nuevas olas de la pandemia de Covid-19 y a la volatilidad financiera internacional, generada, por ejemplo, por el aumento de las expectativas de inflación en las economías avanzadas y la correspondiente normalización más rápida de lo previsto de sus políticas monetarias.

“Estos choques podrían aumentar los rendimientos, la prima por riesgo y las salidas de capitales de México. El nuevo acuerdo en el marco de la Línea de Crédito Flexible continuará siendo un instrumento de apoyo importante para la estrategia macroeconómica de las autoridades, al ofrecer un seguro frente a los riesgos extremos y apuntalar la confianza del mercado”.

El FMI señaló que las autoridades mexicanas tienen la intención de asignarle un carácter precautorio al acuerdo. Explicó que la disminución en el monto disponible es adecuada, dada la disminución de los riesgos en comparación con el año pasado y también retoma la estrategia adoptada por las autoridades antes de la pandemia de reducir gradualmente el uso de este servicio.

“Las autoridades mexicanas han manifestado su intención de solicitar una nueva reducción del acceso en la revisión de mitad de periodo, dependiendo de la evolución de los riesgos externos”, añadió.